Argentina consiguió por primera vez que el Fondo Monetario Internacional (FMI) revise todas las cláusulas del acuerdo por la deuda que contrajo el gobierno de Mauricio Macri. De esta forma, se reverán el acuerdo fiscal, monetario y de acumulación de reservas. Además Argentina recibirá más fondos de los que tendría que utilizar para pagar y que podrán ser usados para administrar los dólares financieros.
Fuentes del Ministerio de Economía informaron a El Destape que la decisión de avanzar en una modificación integral de las metas se adoptó tras una reunión entre el ministro de Economía, Sergio Massa y Gita Gopinath, la vicedirectora gerente del FMI. La funcionaria del organismo reconoció que la sequía era el elemento disruptivo que los obligaba a iniciar las negociaciones para modificar el acuerdo.
El cálculo de Economía sobre la sequía, convalidado por el organismo multilateral, es que este año habrá 13.000 millones de dólares menos de exportaciones. Esto implicará una menor recaudación por derechos de exportación que lleva a una inexorable revisión del acuerdo.
En un fuerte discurso ante autoridades del FMI y el Banco Mundial en las reuniones primavera, Massa cuestionó el préstamo al gobierno de Mauricio Macri al considerar que fue usado para financiar la fuga de capitales algo que el propio estatuto del Fondo prohíbe.
"La idea de la flexibilidad disparó en la Argentina un proceso de endeudamiento que solo sirvió para financiar la fuga de capitales, la formación de capitales externos. Esa operación fue llevada por el Fondo en 2018", afirmó Massa, quien luego explicó que los altos niveles de inflación se deben a que la imposibilidad de acceder al crédito llevó a que se deba emitir para solventar los gastos que debió hacer el estado en medio de la pandemia del coronavirus.
El ministro de Economía cuestionó que la renegociación del programa con el FMI luego de la pandemia del coronavirus llevó demasiado tiempo y complicó las finanzas de la Argentina en medio del impacto de la guerra entre Rusia y Ucrania.
"Estamos trabajando codo a codo por un nuevo shock que ahora es particular y que es la sequía. Digo esto porque la combinación de falta de crédito, la pandemia y la sequía en países que depende de su comercio exterior inexorablemente necesita tener programas orientados no al financiamiento del gasto público sino al financimiento y al funcionamiento de su economía real. Esto es algo que en algún momento tendremos que discutir", agregó Massa.
Recientemente el FMI había recortado el nivel de reservas que Argentina necesita acumular para fines de este año en 1.800 millones de dólares, por la sequía que ha afectado la producción de soja y maíz, los principales productos de exportación.
La reunión con el Fondo y el desembolso del Banco Mundial
En el encuentro, Gopinath y Massa coincidieron en advertir la gravedad de la sequía histórica y, por lo tanto, acordaron en la necesidad de "reformular" el programa. "Están todas las alternativas sobre la mesa", señalaron fuentes del Ministerio de Economía acerca de los cambios que se están evaluando.
De la reunión participaron también el secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein; el director del Indec y secretario de Asuntos Económicos, Financieros Internacionales, Marco Lavagna; y el jefe de Asesores de la cartera, Leonardo Madcur. En tanto, por el FMI estuvieron Luis Cubeddu, jefe de la misión del organismo para la Argentina y el equipo técnico del organismo.
Asimismo, Massa se reunió con la nueva directora gerente de Operaciones del Banco Mundial (BM), Anna Bjerde, tras lo cual anunció que dicha entidad desembolsará US$ 950 millones en los próximos meses para diversos proyectos atendiendo al impacto de la sequía en la Argentina.
El ministro calificó como "muy positiva" la reunión que mantuvo con Bjerde, mientras que ésta ratificó el sólido apoyo de la institución a nuestro país, especialmente luego del fuerte impacto de la sequía, lo que se traduce en proyectos en preparación para mayo y junio por US$ 950 millones, según un comunicado difundido por el Palacio de Hacienda.
En la reunión también estuvieron Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del BM para América Latina y el Caribe; la directora ejecutiva por Argentina y el Cono Sur, Cecilia Nahón; y Marianne Fay, representante de la entidad en el país.
En su cuenta de Twitter, Bjerde afirmó que "Argentina está experimentando su peor sequía desde 1906" y reiteró que el Banco Mundial es "un socio clave para garantizar un retorno sostenible al crecimiento y resiliencia a largo plazo".
No se trata del único desembolso del BM para la Argentina, pues ayer el propio Massa y su par de Educación, Jaime Perczyk, anunciaron en Washington un aumento del 42% de las becas Progresar, tras acordar con el organismo un financiamiento por US$ 300 millones.
El aumento de las becas "permitirá seguir fortaleciendo las trayectorias educativas al elevar a $ 12.780 el monto que reciben 1.700.000 jóvenes", dijo el ministro de Economía.