Los salarios volvieron a acompañar, en promedio a la inflación durante el mes de junio pasado, según reveló el Indec este jueves, con los trabajadores públicos como el sector que lidera la suba en lo que va del año. Concretamente, el índice de salarios registró en junio un incremento de 6,1%, una décima por encima de la inflación, que fue del 6% en ese mismo mes.
En la división por sectores, los haberes de los trabajadores privados registrados aumentaron 5,7%, los sueldos de la administración pública crecieron 6% y los del sector informal subieron un 7,5%.
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Tomando el registro interanual, sin embargo, los trabajadores públicos fueron los únicos que le ganaron a la inflación del 115,7%, ya que su suba salarial fue casi 6 puntos porcentuales superior mientras que, al contrario, los privados formales tuvieron una suba 11 puntos menor. Así y todo, los más golpeados fueron los informales, cuya suba interanual fue 33 puntos más baja que la de la suba de precios.
En ese sentido, cabe aclarar que la aparente suba superior de los trabajadores informales en verdad no corresponde al mes de junio, ya que el índice de salarios para los no registrados se elabora con un rezago de cinco meses y un promedio trimestral.
Por ello, los índices revelados por el Indec en junio en verdad "marcan el cambio que está teniendo el régimen inflacionario, de un régimen fuerte y creciente a uno de estabilización. Y eso hace que el sector formal te marque un crecimiento menor de las remuneraciones en el marco de ajustes y de esta estabilización de la inflación", señaló a El Destape Agustín Salvia, director del Observatorio Social de la UCA.
Del mismo modo, el elevado 7,5% de crecimiento salarial de los informales "marca un crecimiento alto y elevado durante el primer trimestre donde fue una fuerte actualización de precios y de servicios en donde el sector informal tiene fuerte impronta", agregó Salvia, y aclaró que aun así "no marca un cambio real de la situación de los informales con respecto a los formales venían perdiendo históricamente".
Con todo, podría esperarse una cierta mejora de los salarios reales durante a partir de julio, dado que "muchas paritarias se dieron a corto plazo, dando lugar a bajos aumentos con la condición de aplicar una eventual cláusula gatillo que entrará en vigencia en la segunda mitad del año", consideró la consultora LCG.
De hecho, parte de este recorte de la caída del salario real ya comenzó a verse levemente en junio, ya que la variación interanual de los tres grupos salariales fue del 108,7%, contra un 106,3% de mayo. Es decir, una suba de 2,4 puntos reales cuando la inflación interanual entre estos dos meses creció solo 1,4 puntos porcentuales.
Aun así, la perspectiva de lo que va de 2023 muestra que todos los sectores percibieron una baja del salario real, que va desde al 0,3% entre los públicos hasta un 6,4% entre los informales, pasando por un 2,2% de los privados registrados. Al respecto, LCG sostiene que "con una inflación elevada y errática no esperamos una mejora real de los salarios para el promedio del año, dado que estos presentan mayor rigidez al momento de un ajuste que el promedio de los precios".