En el Gobierno hay optimismo por el proceso de reactivación económica que se consolida en los últimos meses. Los pilares en lo que se sostiene el Frente de Todos es el crecimiento de la actividad, con eje en la industria y el aumento del consumo por parte de los asalariados.
De acuerdo al último informe del Indec, El índice de agosto de la actividad económica creció 12,8% en la variación interanual y, por primera vez, llegó a niveles similares a los de febrero de 2020 (previo al inicio de la pandemia). En los primeros ocho meses de este año, la industria manufacturera y el comercio mayorista y minorista, que entre los dos explican aproximadamente un tercio de los puestos de trabajo de la economía, registran tasas de crecimiento de más del 4% respecto del mismo período de 2019.
La construcción (importante también en términos de empleo) y otros sectores asociados a los servicios (ligados en buena parte a la dinámica del mercado interno) en los últimos meses mostraron una importante aceleración en la tasa de recuperación, si bien aún están por debajo de 2019. Tal es el caso de servicios comunitarios, sociales y personales, vinculado en buena medida a servicios culturales y deportivos; y hoteles y restaurantes.
En buena medida, la recuperación de la actividad está asociada a la mejora de la demanda interna. Los datos del segundo trimestre de la EPH ya mostraban una recuperación del empleo respecto de la pandemia: la población ocupada fue similar a la del último trimestre de 2019, con un crecimiento incluso de los asalariados registrados.
Salarios y consumo
La mejora del empleo estuvo acompañada, además, de un crecimiento de los ingresos, ya que desde diciembre los salarios de los trabajadores registrados acumularon una suba de 35,1 por ciento, superando el aumento de precios del mismo período (32,2%) y dando como resultado un incremento en términos reales de 2,1 por ciento del ingreso. La recuperación del mercado interno se reflejó en los indicadores de ventas de los supermercados y autoservicios mayoristas, con subas en términos reales de 4,5 y 2,4 por ciento, respectivamente, en la comparación interanual.
En el acumulado de los primeros ocho meses del año, el crecimiento de las ventas de supermercados está en línea con el del mismo período de 2020 (que habían subido 1,5%, incluso pese a la pandemia), mientras que los autoservicios mayoristas acumulan un alza de 5,3 por ciento frente al mismo período anterior (también habían crecido 7,3% en la variación interanual).
La mejora del consumo se observa además en las estadísticas de los centros de compras (shoppings), cuyas ventas siguen estando por debajo de los meses previos a la pandemia, pero el ritmo de recuperación de los comercios se aceleró en los últimos meses: en agosto las ventas a precios contantes fueron equivalentes al 73,4% de las registradas en el mismo mes de 2019.
La evolución de las importaciones ratifica la recuperación del consumo y de la producción. Las compras de bienes de consumo del exterior aumentaron en septiembre alrededor de 20 por ciento interanual, mientras que las importaciones de bienes intermedios (asociados al aumento de la producción) lo hicieron por encima del 50 por ciento interanual.
En buena medida, el aumento de las importaciones respondió a las mayores cantidades. En los primeros nueve meses del año, las cantidades importadas de bienes de consumo crecieron 32,3 por ciento frente al mismo período de 2020 y se ubicaron 18,1 por ciento sobre los valores de prepandemia. En el mismo sentido, las compras al exterior de bienes intermedios se incrementaron 41,8 por ciento en las cantidades respecto de 2020 y registran los niveles más altos de la serie.
Exportaciones
Las exportaciones crecieron en septiembre 59,8 por ciento respecto del mismo mes de 2020 y, dejando de lado el dato de agosto, alcanzaron el valor más alto desde 2013. En los primeros nueve meses del año, las exportaciones totalizaron 58.276 millones de dólares, con una variación interanual positiva de 38,2 por ciento.
Medidas en cantidades, las ventas al exterior alcanzaron el nivel más alto desde mediados de 2011. El saldo comercial acumula un superávit de 12.322 millones de dólares en los primeros nueve meses del año, el valor más alto desde el año 2009.
El crecimiento de las exportaciones de bienes está acompañado por la recuperación de las ventas de servicios: en el segundo trimestre de 2021 el ingreso de dólares de la cuenta de servicios alcanzó los 2.110 millones, con un aumento de 12 por ciento respecto del mismo período de 2020.