En el marco de la reactivación económica luego de los picos de la pandemia de coronavirus y los cuatro años del macrismo, un empresario apuesta fuerte por dos marcas icónicas argentinas: se trata de las clásicas Grafa y Ombú, que volvieron a manos nacionales.
El presidente Alberto Fernández visitará mañana por la tarde la provincia de Catamarca, donde además de participar del acto oficial por el Bicentenario de la autonomía provincial, realizará una recorrida por las instalaciones de la empresa textil Confecat S.A., que elabora ropa y calzado de trabajo.
El dueño de esa empresa, acompañando el actual proceso de reactivación económica y de desarrollo industrial, se hizo cargo de dos marcas icónicas de nuestro país, como Grafa y Ombú. Carlos Muia, desde Catamarca, compró el 45% de Santista Argentina, el principal productor de denim y ropa de trabajo del país y, además, adquirió Confecciones Riojanas, una planta que fue cerrada en 2019: ahora se llama Confelar, tiene dos plantas en La Rioja y una hace más de 11 años en Famatina con más de 100 operarios.
Muia se radicó en Catamarca hace 40 años, fundó la empresa textil Confecat, es dueño de cuatro plantas textiles en el norte y da trabajo a 1.675 operarios. Esto lo convierte en el mayor empleador de la provincia.
“Comprar Santista fue la operación más importante de mi vida”, confesó Muia al referirse a la ex Grafa (Grandes Fábricas Argentinas), que fue fundada hace 95 años por el grupo Bunge & Born para industrializar fibras, y que en la década del ’40 sumó a la marca Ombú, que rápidamente se consolidó como la líder en el segmento de ropa de trabajo.
En Argentina, Santista tiene una planta en Famaillá, provincia de Tucumán, donde trabajan 900 operarios y es líder en la producción de denim y ropa de indumentaria de trabajo con su marca Ombú, entre otras.
La planta de Tucumán produce 2.200.000 metros de tela mensuales, de los cuales 1,2 millones son de jean y gabardina de prendas de vestir y un millón es tela de indumentaria para trabajo. Es el mayor productor de telas de jeans del mercado nacional y produce el 80% de la ropa de trabajo que se usa en la Argentina.
Santista es dueña de la marca Grafil que produce telas para el sector salud y guardapolvos colegiales. "Estamos orgullosos por la compra, estamos orgullosos por la visión de país que nosotros queremos. Queremos un país donde la burguesía nacional recupere el protagonismo de conducir resortes básicos de la economía en la industria y en el comercio", expresó Muia, presidente de la Unión Industrial de Catamarca.