De la mano de una reapertura por el mejoramiento de las condiciones sanitarias, producto del avance de la campaña de vacunación y de la intervención del Estado para generar reactivación, poco a poco se percibe el aumento de la actividad económica en todos los rubros de la economía de la provincia de Santa Fe. Este Día del Niño fue una oportunidad para ver renacer el comercio, tras un 2020 en el que todos los indicadores habían tocado fondo. Fuentes oficiales afirman que se recuperó lo perdido y se empataron los números pre pandemia, aunque algunos estuvieron mejor incluso que en 2019. Los programas estatales de estímulo al consumo, tanto nacionales como provinciales, traccionaron la recuperación.
Desde la Secretaría de Comercio Interior de la provincia indicaron que la recuperación de las ventas se ubicó alrededor del 25% respecto del año pasado, con gran participación de jugueterías y librerías, locales especializados en los artículos que se compraron para regalar. El número fue refrendado por los comerciantes, quienes aseguran que se superó raudamente los números de la pandemia, y en algunos casos hasta se empató los de 2019. "Estamos en un punto cero, con todo por ganar para adelante. Se detuvo la caída y hay expectativas de mayor consumo", dijo a El Destape el titular del área Juan Marcos Aviano.
El de Rosario es un caso testigo, un gran conglomerado con mucho peso del sector privado, que llega al 80% contra un 20% de empleo público. A diferencia de otros años, en esta oportunidad hubo un notorio mayor movimiento desde una semana antes de la fecha de celebración. El sábado de la víspera el centro, corazón comercial, explotó de clientes. “Estamos contentos”, destacó Matías Benzi, integrante de la Cámara de Jugueteros, quien calculaba una recaudación de al menos 20% por encima de la del año pasado, cuando había más limitaciones a la circulación y en los ingresos de los comercios, y la gente no se animaba a salir o tenía más incertidumbre sin la vacuna en el horizonte.
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Estímulo estatal
Los programas de incentivo al consumo permitieron vender regalos de mayor valor, ya que ocho de cada diez ventas se hicieron bajo promociones. “Billetera Santa Fe funcionó muy bien, porque la gente entraba dispuesta a gastar 2 mil pesos y se llevaba un juguete de 3 mil”, aseguró Benzi. Casi la mitad de las ventas se realizaron con el programa de la provincia destinado a encender los motores del consumo que reintegra el 30 por ciento de las compras en distintos rubros con un tope de devolución de 5 mil pesos por mes. El ticket promedio con BSF fue de 2 mil pesos durante la semana en librerías y jugueterías. Solo el día sábado registró compras por 400 millones de pesos.
Lanzada por Omar Perotti en enero en medio de una época de bolsillos flacos, la app para celulares que permite pagar con QR y obtener descuentos ya tiene 850 mil usuarios, 18 mil comercios, concretó 9 millones operaciones por 18.200 millones de pesos en ventas, y emitió reintegros por 5 mil millones, 4.250 millones aportados por la provincia y 750 millones por los comercios. Se trata de una política de fomento al comercio y el consumo que tiene el objetivo es incrementar las ventas en rubros comerciales afectados por la crisis económica y la pandemia y elevar el poder adquisitivo de familias, con la idea de que los reintegros vuelvan al consumo y se forme un círculo virtuoso.
El resto de las ventas se hicieron mayormente con promociones de bancos con tarjeta de crédito que hacían descuentos entre el 20 y 40%, más políticas del gobierno nacional como el recientemente relanzado Ahora 12, en sus distintas opciones de financiamiento, con 3, 6, 12 y 18 cuotas, pero solo para juguetes nacionales, un modo de incentivar la producción en el país. Los clientes buscan cada vez más los beneficios y los descuentos para comprar juguetes, y las compras al contado quedaron relegadas a un segundo plano. “Respecto del año pasado, lo importado aumentó con el dólar oficial, que se movió de 97 a 100 pesos, casi nada. Y lo nacional entre un 15 y 20%”, estimó Benzi sobre los precios.
“Los programas ayudaron a aumentar las ventas de juegos y juguetes, con una industria que se está recuperando luego de golpes duros como las devaluaciones de 2018 y 2019 y las altas tasas de interés que perjudicaban tanto la financiación de la producción como las ventas”, afirmó Fabio Acosta, titular de la Asociación Casco Histórico Comercial, quien dijo además que las fábricas de juguetes “están llegando a ocupar más del 60% de la capacidad instalada, nivel que supera los registrados en los dos años anteriores a la pandemia. Según su relevamiento del movimiento comercial, las ventas superaron los niveles del 2019, incrementándose en un 10% promedio en unidades.
Recuperación del comercio en Santa Fe
Nelson Graells, presidente de Amigos de la Peatonal Córdoba y titular de una megared de indumentaria deportiva y urbana con 42 locales en la ciudad, ubicó las ventas de su grupo en un 13,49% por encima del 2019. "Hubo un crecimiento por encima de lo esperado. Fue una excelente semana, e independientemente de lo que es exclusivamente de niños, estaban todos los comerciantes muy contentos”, contó a El Destape. Jugueterías y todos los locales que tenían algo para ofrecer para las infancias, fueron obviamente los que más trabajaron. “Pero como siempre pasa, al haber gente en la calle, los otros rubros también se beneficiaron del derrame de ventas”, atestiguó.
Miguel Rucco, presidente del paseo comercial calle San Luis, el Once rosarino, fue optimista pero algo más cauteloso: destacó que la convocatoria superó las expectativas, pero detalló que si bien los comercios “vendieron muchísimo”, más de lo que venían haciendo, y en especial comparado con la misma fecha del año pasado, en su zona aún no se llegó a los números pre pandemia. “Vendimos un 20% más que el año pasado, pero estamos todavía 15% abajo de 2019, y ya era un año en el que veníamos con caída desde 2016”, especificó.
Ahora, la mira de los comerciantes estará puesta en el Día de la Madre de octubre y las fiestas de fin de año, los otros dos grandes hitos del año junto al Día del Padre y Reyes. De seguir esta tendencia, se espera un cierre del 2021 con algo de alivio para el sector, que comenzó a recuperarse lentamente luego de mucho tiempo de incertidumbre y ahora mira el futuro con otra cara.
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