Bajo la excusa de la quita de recursos por coparticipación, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires prevé un ajuste real del 3% para la inversión pública en 2021. Sin embargo, al revisar las partidas proyectadas para cada área presupuestaria, la caída del gasto es aún mayor.
El ejecutivo porteño finalmente envió a la legislatura de la Ciudad el proyecto de presupuesto para el año 2021. De acuerdo a un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav), los gastos corrientes sufrirán un ajuste mayor al general, del 6,2%.
En detalle, los gastos de capital crecerán un 20%; pero esto se debe a que partirán de un nivel particularmente bajo, ya que por la pandemia las obras prácticamente se frenaron en 2020, cayendo un 33%. Con respecto al 2019, el gasto de capital será un 20% inferior en 2021.
Los gastos destinados para Servicios Sociales, que en el 2020 tendrán un aumento real del 3,2% en relación al 2019, se contraerán en términos reales un 6,3% con respecto al corriente año, quedando 3,3% en 2021 con respecto al 2019.
En el presupuesto 2021 del distrito gobernado por Horacio Rodríguez Larreta, en materia de endeudamiento se destaca la búsqueda de autorización de endeudamiento por $ 32.000 millones en letras del tesoro en pesos o en dólares y por $ 15.000 millones para cancelar deuda con proveedores. “Aún así, hay que remarcar que para el año próximo se estima aumentar la deuda pública en un 25%, por debajo de la inflación proyectada. Es decir, por primera vez en por lo menos 5 años, la CABA no proyecta hacer crecer, en términos reales, la deuda pública de la Ciudad”, sostuvo el informe.
En términos reales, la deuda pública para 2021 se estima que caiga en un 2,4% en relación a este año y un 13% en relación a 2019. Sin embargo, si se analiza la política de endeudamiento desde 2016, el incremento en términos reales entre 2021 y 2016 es de 178,3%.
Las diferencias del presupuesto de Ciudad y el de Nación
Por otra parte, si se compara lo que cada presupuesto estima para 2021 en relación a lo ejecutado en 2019, “se pueden marcar las distintas prioridades de cada gobierno”, apuntó el documento. Por ejemplo, los gastos de capital, muy relacionados a inversión en infraestructura, comparado con 2019, crecen un 73,7% en Nación y un 135,5% en la provincia de Buenos Aires, mientras que en CABA se contraen un 20,2%. Asimismo, los servicios sociales, en el mismo periodo, se incrementan un 15,6% en el presupuesto nacional y un 20,9% en la provincia de Buenos Aires, mientras que en CABA se recortan un 3,3% en términos reales.
En Educación y cultura, mientras que en el presupuesto nacional los recursos destinados crecen de manera real un 21,1% en relación a 2019, “en el presupuesto de la Ciudad se muestra una desinversión de 1,3%”, analizó la Undav. En el caso de la inversión en políticas de viviendas, el gobierno de la Ciudad reduce los recursos destinados un 45,3% en términos reales, mientras que el gobierno nacional incrementa la inversión en un 203%.
Con respecto a la inversión en obras de agua potable y alcantarillado, Nación aumenta los recursos en un 258,2% en términos reales y Ciudad ajusta los gastos en esta finalidad en un 38,7% en relación a 2019.
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