Tras el pico de marzo, ¿qué pasará con la inflación hasta fin de año?

Precios Justos no logra contener las remarcaciones y la brecha cambiaria alienta escaladas por parte de las empresas. La opinión de expertos frente a una meta anual del 60% que luce incumplible.

16 de abril, 2023 | 00.05

Luego del pico inflacionario de marzo, la pregunta que surge es saber hasta dónde llegará el espiral de aumentos. Con el peor registro en dos décadas, el Gobierno no encuentra respuestas efectivas para frenar el brutal salto de precios, con foco en alimentos. Precios Justos no surte efecto y la brecha cambiaria que genera la falta de dólares genuinos abre el escenario a una remarcación por parte de las empresas. La meta anual del 60% luce incumplible y se impone con fuerza la idea de un diciembre con tres dígitos por delante.

El economista de la consultora Ecolatina, Santiago Manoukian, fue contundente: "Nada te asegura que la inflación de marzo vaya a ser la mayor de 2023 ¿Por qué digo eso? El primer trimestre dejó un piso elevado de inflación de cara al resto del año, donde la inercia inflacionaria va a continuar ejerciendo presión sobre el nivel de precios, alimentada por una creciente indexación y un acortamiento a los plazos de los contratos, tanto formales como como informales".

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"Sobre esa tendencia, se le van a sumar aumentos puntuales en los servicios públicos, sobre todo porque se va a tener que acelerar la segmentación de tarifas, además de la consolidación fiscal que está llevando adelante del gobierno y que le exige el FMI. Sobre todo porque se está tensionado el programa financiero", analizó el economista. En ese sentido, proyectó que "probablemente" haya "tensiones sobre la brecha", ya que crecerán "las expectativas de devaluación presión adicional en el marco de las restricciones sobre las importaciones".

"Se suma esta novedad del dólar agro, que es inflacionario. Obviamente, estamos con en contexto de manta corta donde buscas dólares. Uno de los efectos colaterales que tiene eso es un impacto mayor sobre los precios", agregó Manoukian. Según la consultora, la inflación "difícilmente" perfore el seis por ciento en lo que resta del año, que va a cerrar en, por lo menos, un cien por ciento interanual.

Por su parte, el economista integrante del Centro de Economía Política (CEPA) Martín Epstein afirmó que "el 60% anual luce como una meta muy poco cercana, muy poco viable. Por lo menos parece muy muy distante... debería haber un cambio muy drástico del escenario macro sobre todo para poder imaginar que se pise la inflación fuertemente en el resto del año".

"Me da la sensación de que el gran problema no tiene que ver con los acuerdos de precios, que realmente no estamos funcionando de ancla, sino con la escasez de divisas que presiona sobre la brecha, y termina generando una especie de justificativo para la remarcación constante y el aumento preventivo", remarcó el economista. Según su perspectiva, "en teoría estamos en un acuerdo de precios que fija aumentos topeados en el 3,2% de alimentos, y estás arriba del9% en alimentos". 

En ese sentido, amplió: "El problema de este escenario tiene que ver más con ordenar la macro que con con los acuerdos del precios, pero no descarto que los haya como un componente acompañamiento, sobre todo para que esto no se desmadre un poco más todavía. Hay que ver qué invento coincide más en próximo tiempo y qué tan efectivo sea el dólar soja tres".

Los datos duros sobre la inflación de marzo

La inflación minorista de marzo fue 7,7% mensual, tercer mes al hilo en aceleración, y alcanzó el registro más alto desde abril 2002. En tres meses, los precios minoristas acumulan una suba del 21,7% y en 12 del 104,3%. Marzo suele ser un mes en el cual la estacionalidad juega en contra, por la incidencia de estacionales (inicio escolar y nueva temporada en indumentaria). Estos fueron los bienes y servicios que más subieron (+9,3%), seguidos por los regulados (+8,3%).

Más allá de los aumentos autorizados de cada mes, no parece haber un factor puntual que esté empujando la inflación: las tarifas y el tipo de cambio corren todavía por detrás a los precios, la actividad no tiene un dinamismo para impulsar al alza a los precios, los salarios lejos están de ganar la carrera y los factores de oferta a nivel internacional están cediendo. Son las expectativas de inflación las que la sostienen en registros de tres dígitos.

Según el CEPA, por segundo mes consecutivo, el precio de la carne influyó sensiblemente en la medición del mes, explicando el 50% de las variaciones del rubro. En lo referido a frutas y verduras, hubo incrementos sensibles en algunos productos, pero en parte compensados con reducciones de otros.

Como sucede desde mediados de diciembre, el control de precios tuvo dinámicas diferenciadas: los productos dentro del programa de Precios Justos mostraron, en los grandes supermercados, una evolución en línea con el acuerdo (6,5%), pero superaron ese guarismo en mercados y bocas de expendio de cercanía.