El precio del barril de petróleo registró una leve suba en Nueva York, tras el fuerte repunte de los días previos, debido a que los inversores tienen dudas de que la demanda se mantenga durante el verano boreal, como consecuencia del nuevo incremento de la tasa de interés dispuesto por la Reserva Federal de EEUU y un aumento de la aversión al riesgo.
El barril de la variedad WTI subió 0,4% hasta los 82,10 dólares; mientras que el tipo Brent escaló 0,3% y se negoció en 85,70 dólares, según cifras consignadas en el New York Mercantil Exchange (Nymex).
Si bien el repunte del precio del crudo en lo que va del actual verano borró las pérdidas registradas de los primeros seis meses, los operadores comenzaron a plantearse la necesidad de una corrección técnica.
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Los volúmenes también permanecen en niveles modestos en las operaciones ligeras de verano, mientras que la volatilidad está en su nivel más bajo desde enero de 2020.
Las principales naciones productoras de petróleo, lideradas por Arabia Saudita y Rusia, han ajustado el mercado al reducir voluntariamente su producción, buscando estabilizar los precios después de que los inversores sintieran que el aumento de las tasas de interés frenaría el crecimiento económico y la demanda de combustible.
Las operaciones muestran un comercio relativamente débil durante el verano del hemisferio norte, decepcionando a los operadores.
La producción de crudo de las naciones de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) cayó al máximo en tres años cuando Arabia Saudita implementó un recorte más profundo en un intento por apuntalar los mercados globales.
Los bombeos cayeron en 900.000 barriles diarios, el mes pasado a un promedio de 27,8 millones de barriles diarios, según una encuesta revelada hoy por la agencia Bloomberg.
Este es el mayor recorte de producción del cartel y sus aliados OPEP+ desde la pandemia de Covid en 2020.
Los inversores esperan que Arabia Saudita anuncie una extensión de los recortes a partir de septiembre en los próximos días, profundizando los signos de un déficit de oferta en el mercado. Para los países importadores esto significa que la inflación puede volver a tomar impulso. Para las naciones productoras, este movimiento parece indicar que se necesitan más precio de exportables para cubrir el gasto fiscal.
Arabia Saudita bombeó un promedio de 9,15 millones de barriles por día en julio, según la encuesta. Nigeria, 1,26 millones de barriles diarios.
Libia sufrió un revés, con una producción que cayó en 50.000 barriles por día a 1,1 millones por día, luego de una protesta que detuvo brevemente su producción.
Los contratos de futuros de gas natural para entrega en septiembre cayeron 2,1% y se negociaron en 2,58 dólares por millón de BTU.
Finalmente, el oro bajó 1,4% y cerró en 1.982 dólares por onza.
Con información de Télam
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