Tras la disparada de enero, el Gobierno apuesta a estabilizar el ritmo de la inflación con vistas a marzo. Sin embargo, tras el paquete de medidas anunciado por el Ministerio de Economía apuestan a "suavizar" el impacto en el rubro alimentos, que se desbandó en el arranque de enero aún con la vigencia del programa Precios Justos. El último registro del segmento mayorista no es prometedor y esperan contener las subas en los productos que componen la canasta básica de alimentos.
Los precios mayoristas subieron durante enero el 6,5% y preocupa el efecto que pueda llegar a tener sobre el índice minorista de febrero. La aplicación del programa Precios Justos funcionó como un dique e impidió el traslado de aumentos en el mercado mayorista hacia el segmento minorista en el último tramo del año, pero en esta oportunidad se vislumbra una desaceleración solo para el rubro de alimentos.
Usualmente, la inflación mayorista funciona como un parámetro de anticipación sobre el índice minorista que se publica en el mes posterior. Solo para ejemplificar: la suba en mayoristas de septiembre fue del 5,5%, mientras que la inflación minorista de octubre fue del 6,3%. En tanto, el aumento en mayoristas de octubre fue del 4,8% y la minorista de noviembre se ubicó en el 4,9%, ya acortando la brecha.
En noviembre trepó al 6,3% y la minorista en el último mes del año fue mucho menor, al situarse en el 5,1%; en diciembre aumentó 6,1% y en enero la minorista fue del 6% durante enero. El roce es cada vez mayor y el último dato de enero proyecta una cifra todavía elevada para la minorista de febrero.
Para frenar la escalada, por lo menos en alimentos, el Gobierno puso en marcha una serie de medidas. A los renovados Precios Justos, lanzó un acuerdo con frigoríficos exportadores para vender siete cortes con descuentos del orden del 30%. El entendimiento congelará valores hasta el 31 de marzo, y luego habrá una pauta de aumento del 3,2% hasta el 30 de junio.
Además, se aplicará una batería de instrumentos que apuntarán a bancarizar carnicerías de barrio, descuentos para consumo con tarjeta de crédito y débito, y subsidios al alimento para engorde de ganado con la meta de beneficiar a los productores afectados por la sequía. También corre la idea de trabajar en un programa similar pero destinado al mercado de frutas y verduras.
Sobre las iniciativas previstas para robustecer las reservas del Banco Central -que ya vendió más de US$ 500 millones en lo que va del mes-, el Ministerio de Economía trabaja para cerrar un un préstamo garantizado con papeles de la deuda, para el que ya contaría con siete oferentes por un monto proyectado en US$ 1.000 millones.
Cómo vienen los precios de febrero
De acuerdo a un relevamiento del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz, en lo que va de febrero los aumentos se moderaron en algunos sectores:
- Limpieza: 2%
- Hogar: 0,4%
- Alimentos frescos: 2,1%
- perfumería: 1,2%
- textil e Indumentaria: 0,2%
- Bebidas: 1,3%
- Alimentos secos: 1,6%
- Electrodomésticos: 1,7%
Las cifras parecen ser moderadas respecto a enero, pero esto no cuenta el impacto alcista que generan los servicios y los factores estacionales. Según el relevamiento efectuado en supermercados y negocios barriales de la ciudad de Buenos Aires por la organización Consumidores Libres, el precio de los 21 productos de la Canasta Básica de Alimentos tuvo un aumento del 2,04% durante la primera quincena de febrero. En lo que va del año, la suma acumulada es del 9,41 %.
Un panorama más pesimista difundió la consultora LCG. Desde su espacio relvaron que en la segunda semana de febrero hubo un incremento en el nivel de precios de los alimentos y bebidas del 1,8% y se mantuvo casi en los mismos niveles respecto a la semana previa. Se trata de una cifra negativa si se tiene en cuenta el reciente relanzamiento del programa de control Precios Justos, que tiene como objetivo marcar un descenso inflacionario en los productos que componen la canasta básica. Tal como viene sucediendo en las últimas semanas, la carne lideró los incrementos, pero frutas y verduras se desaceleraron de forma muy marcada.
De acuerdo a un informe al que pudo acceder El Destape, en la segunda semana de febrero la suba de precios de los alimentos promedió 1,76%, desacelerando 0,08 puntos respecto la semana anterior. Sin embargo, el dato más preocupante es que el índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual de 6,4% promedio en las últimas cuatro semanas.
En esta oportunidad, el porcentaje de productos con aumentos semanales se mantuvo en torno al 29%, ubicando al promedio de las últimas cuatro semanas en un 27% de la canasta. El elemento a subrayar es que la inflación promedio mensual se ubicó en un 6,4%, acelerando por octava semana consecutiva, y alcanzando el mayor valor desde la primera semana de noviembre. Concretamente, tres de 10 categorías presentan una inflación mensual por encima del 7% promedio.