Luego del plan económico anunciado por el Gobierno, el precio de las naftas se disparó entre un 35 y 37%, lo que se suma a las alzas registradas la semana pasada antes del traspaso de mando. El impacto en el valor empezará a regir después de las 00 de esta noche.
El flamante ministro de Economía, Luis Caputo, dio a conocer su plan Económico de diez medidas, que incluyó una devaluación del 119%. Aunque no hubo anuncios en esta materia, se esperaba que la devaluación -que llevó el dólar oficial a 800 pesos- repercutiera en las petroleras. Con YPF a la cabeza, las empresas buscan garantizar el abastecimiento de combustibles porque alrededor del 60% del costo está dolarizado.
Los aumentos pasados se dieron el 8 de diciembre, tan sólo dos días antes del traspaso de mando, lo que significa un 58% de aumento en los últimos días. La semana pasada, Shell y Puma empujaron los precios un 15% en promedio en todo el país, mientras que YPF se plegó con un aumento mayor, de hasta el 30%. Por poner un ejemplo, la nafta Shell V Power pasará a costar $767, cuando el 8 de diciembre estaba $485.
Hasta el 8 de diciembre, los precios de la petrolera estatal estaban en: Nafta Súper: $ 404, Infinia: $ 499, Diesel 500: $ 431 y Infinia Diesel: $ 543.
Ahora, el litro de nafta súper en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se ubica en $ 550, la nafta premium en alrededor de $ 685, el gasoil $ 590 y el gasoil premium $ 745, según el porcentaje promedio del aumento, según reportó Econojournal.
Sin Precios Justos
El raid de precios iniciado desde las elecciones primarias quebró un proceso de aumentos acordados, en el marco del programa Precios Justos implementado desde diciembre de 2022 con subas mensuales de 4,5%, lo que generó un atraso en la actualización de los precios en surtidor. El primero de agosto se habían incrementado los precios en 4,5% como parte del acuerdo por entonces vigente, pero a pocas horas del triunfo de Milei en las PASO y tras la devaluación de 21,6% del tipo de cambio que dejó en 350 pesos por dólar, las petroleras decidieron el 16 de agosto una suba promedio de 12,5%.
Días después, esa alza fue convalidada por YPF y el entonces ministro de Economía Sergio Massa logró acordar con los principales directivos del sector el compromiso de que esos valores se mantendrían fijos hasta el 31 de octubre. En ese contexto de atraso de precios, se fue gestando un desabastecimiento de combustibles con primeras repercusiones en distintas provincias, hasta que días después de la elección de primera vuelta del 22 de octubre, el quiebre de stocks de las estaciones de servicio se hizo notorio en el AMBA.
El 23 de octubre, YPF realizó un incremento correctivo del 5% en los precios de todos sus productos, para compensar el desfasaje de precios con la competencia que venía realizando "microaumentos" como se definió en su momento, más allá del acuerdo de congelamiento. La recomposición del desabastecimiento, ya en plena campaña hacia el balotaje, llevó casi dos semanas, marco en el cual las petroleras realizaron otro ajuste del 9,75% a partir del 1 de noviembre.
Con información de Télam