Una familia porteña necesitó en julio $112.766 para no ser pobre y $173.917 para ser de clase media

19 de agosto, 2022 | 11.49

Una familia de cuatro miembros que habita en la ciudad de Buenos Aires necesitó en julio percibir ingresos de por lo menos $61.244,89 para no ser considerada en situación de indigencia, $112.754,53 para quedar comprendida en la pobreza y $173.917,50 para ser considerada de clase media, de acuerdo con los datos difundidos por la Dirección General de Estadística y Censos porteña.

De esa forma, los gastos de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marcan el límite de la indigencia, tuvieron el mes pasado un aumento del 7,22%, que llegó al 73,30% en el acumulado de los últimos doce meses, superando las marcas de junio que habían sido de 5,04% y 65,18%, respectivamente.

En el caso de la Canasta Básica Total (CBT), que establece el tope de la pobreza, el incremento mensual fue de 7,92% (contra 4,85% de junio) y el interanual del 69,45% (60,77% en el mes anterior), mientras que la Canasta Total (CT), que en diferentes proporciones delimita al sector medio frágil, la clase media y los sectores acomodados, subió 8,12% en el mes (levemente superior al 4,57% de junio) y 69,24% en relación con junio del año pasado (61,36% en la medición previa).

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Los montos señalados no incluyen el pago de alquiler de vivienda ni de expensas comunes, por no ser considerados gastos de consumo.

Los datos de la CBT guardan similitud con los difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) que marcó un monto de $ 111.297, pero en cuanto a la CBA el nivel informado por el organismo porteño es mayor al del nacional, que reportó recursos por $ 49.465, principalmente por una composición diferentes de las canastas.

La evolución de las canastas en julio reflejó un menor incremento de los alimentos por sobre los gastos en servicios y tarifas, que no forman parte de los gastos de indigencia, razón por la que los sectores más vulnerables tuvieron un incremento porcentual inferior al de los otros estratos sociales.

La situación es inversa en la comparación interanual, si se tiene en cuenta que los aumentos de la CBA son casi cuatro puntos porcentuales mayores a los de las canastas que miden la pobreza y la clase media.

A diferencia del Indec, que reconoce solamente las categorías de pobres e indigentes, la Dirección porteña dispone de seis estratos sociales en su clasificación.

En julio, los recursos necesarios para estar comprendidos en cada categoría fueron los siguientes: en situación de indigencia, hasta $ 61.244,88; de pobreza no indigente, de $ 61.244,89 hasta $ 112.765,52; y no pobres vulnerables, de $ 112.765,53 hasta $ 139.133,99.

En el caso del sector medio frágil, de $ 139.134 hasta $ 173.917,49; clase media, de $ 173.917,50 hasta $ 556.535,99; y sectores acomodados, $ 556.536 o más.

Con información de Télam