Canasta básica en CABA: una familia necesitó casi 700.000 pesos para no ser pobre y sin pagar alquiler

A su vez, una familia necesitó ingresos por más de 800.000 pesos para ser considerada de clase media acomodada en la Ciudad de Buenos Aires.

11 de marzo, 2024 | 17.07

En febrero, una familia tipo en la Ciudad de Buenos Aires necesitó percibir ingresos mayores a $ 800.000 para ser considerada de clase media, y de casi $ 700.00 para no quedar bajo la línea de pobreza, según las cifras de la canasta básica que se dieron a conocieron este lunes por el gobierno porteño.

De acuerdo a cifras oficiales, una pareja compuesta por una mujer y un varón de 35 años de edad y propietarios, ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda, con dos hijos varones de 9 y 6 años, requirió $ 684.115 para no ser pobre. En tanto que para no ser indigente ya son necesarios ingresos de por lo menos $ 402.752.

Por otra parte, la Canasta Total, que delimita al sector medio, se encuentra en $ 814.017.  Los valores surgen del relevamiento de datos difundidos por la Dirección General de Estadística y Censos porteña.

La inflación de CABA en febrero fue de 14,1%

En línea con las expectativas del mercado financiero y lo que el Gobierno adelantó serán los números de febrero a nivel nacional, el instituto estadístico de la Ciudad de Buenos Aires informó que la inflación en territorio porteño fue de 14,1 por ciento. Si bien muestra una leve desaceleración --que tomará nuevo impulso en marzo y abril con los ajustes en tarifas de servicios, prepagas, Educación y combustibles, entre otros--, mantiene un bimestre récord, con una inflación minorista acumulada de 38,9 por ciento.

Pese a las cifras que suele enumerar el presidente Javier Milei sobre la inflación heredada, con números estrambóticos como un aumento proyectado en diciembre último de 17.000 por ciento para luego sostener que se está en números más razonables, las cifras de CABA anticipan un alza anualizada que batiría todos los récords. En comparación con igual mes del año pasado, el índice de precios minoristas aumentó 264,5 por ciento, 26 puntos por encima de la interanual de enero, acelerando la carrera inflacionaria. 

La aceleración en los precios, que era alta, se disparó en diciembre con la devaluación que aplicó el ministro de Economía, Luis Caputo, del 53 por ciento (suba de 120 por ciento para el dólar), llevando la inflación de diciembre a los niveles más altos desde febrero de 1991 (había sido de 26,9 por ciento), lo que técnicamente ubicaba la cifra anualizada al 1760,5 por ciento. O como le gusta decir al Presidente, las medidas adoptar ni bien asumió llevaron a que la inflación "viaje" a un ritmo de 1760,5 por ciento anual, lo que se desprende de proyectar es alza mensual de manera acumulada durante todo el año. Con la inflación del 15 por ciento que anticipa Milei, "estaría viajando a 535 por ciento".