Referentes del empresariado local esperan que se produzca una baja de precios en productos importados por el fin del impuesto PAIS que se concretó el último lunes. Sin embargo, los industriales alertan que la mayor apertura comercial que conlleva esta medida tendrá como consecuencia la destrucción de empleos a nivel interno.
El sector comercial recibió con beneplácito la eliminación del impuesto PAIS que, tal como habían anticipado Javier Milei y Luis Caputo, se concretó el lunes 23 de diciembre. Especialmente, destacan el importante paso en pos de la unificación cambiaria.
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"La medida es consistente con la unificación cambiaria en la que está trabajando el gobierno desde el día uno. Ninguna economía del mundo trabajaba con la cantidad de tipos de cambios con la que trabaja Argentina, y eso no solo dificulta las transacciones internacionales sino que, de alguna manera, es 'sacar los pies del plato' de la forma de trabajar en el mundo sin beneficios evidentes", destacó Matías Bolis Wilson, jefe de Economía de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) en diálogo con El Destape.
La CAC niega el temor de algunos economistas sobre que la eliminación del impuesto tenga un impacto negativo en la balanza comercial en medio de la escasez de dólares. "El último dato publicado por el Indec, con datos de noviembre de 2024, mostró un superávit comercial de 1200 millones de dólares y un saldo positivo de más de 17.000 millones de dólares en lo que va del año, con lo que, por ahora, no hay señales de alarma por ese lado", agregó Bolis Wilson, quien apostó también al crecimiento de las exportaciones en petróleo y minería en 2025.
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De manera similar, el titular de la Federación de Cámaras de Comercio Exterior de la República Argentina (FECACERA), Federico Rodríguez, resaltó la menor carga tributaria que tendrán los importadores: "Consideramos que la medida es positiva por ser una baja de impuestos, en un marco en el que la carga tributaria local es muy elevada. Complementariamente parece ser un paso hacia adelante en el camino hacia la salida del cepo cambiario lo cual también es positivo por la mejora competitiva que esto implicaría", dijo a este medio.
Bajan los precios de las importaciones, aunque con condicionamientos
Pero el otro impacto concreto de la eliminación del impuesto PAIS es, según espera el sector empresario, una baja en precios de bienes importados. Esto ocurrirá porque, además de la alícuota del 30% para el dólar tarjeta, el tributo también gravaba con un 7,5% los servicios de fletes desde el exterior, así como con un 25% los servicios adquiridos fuera del país (financieros, de informática, de construcción, de comercio, de telecomunicaciones o de mantenimiento, entre otros).
A raíz de ello, los importadores estiman que habrá efectivamente una baja en precios de productos del exterior, aunque aclaran que será lenta y no necesariamente universal. "Estimamos que está reducción de costos se trasladará a los precios de forma progresiva porque el efecto en la estructura de costos de los importadores no es inmediato", señaló Rodríguez de FECACERA.
Se debe a que, por un lado, "los importadores que generaron un stock de productos con la estructura de costos anterior y tienen la expectativa genuina de recuperar su inversión a dicho valor", agregó.
Y, por otro, a que "algunas empresas importadoras aún se rigen por el tipo de cambio financiero (MEP) o CCL porque los pagos al exterior no se pueden hacer de modo anticipado, como exige la mayoría de los proveedores del mundo". Al ser dólares ya más bajos que el nuevo dólar tarjeta, los productos guiados por estos precios "tendrán mayor resistencia a copiar la baja que implica la eliminación del impuesto PAIS", explicó el titular de FECACERA.
En el mismo sentido, puede esperarse una baja en el precio de alimentos importados, también con cierto rezago por los stocks actuales. "Se va a notar una baja. Hay cosas en stock que están compradas con impuesto, pero en las nuevas se va a notar mas. También depende de la competitividad, capaz alguno baja y otros bajan también", señalaron a El Destape fuentes de las grandes cadenas de supermercados.
De esa forma, esperan que se repita el escenario de septiembre y octubre, cuando, según el Gobierno, los precios de alimentos y bebidas importados disminuyeron un 2,4% por la rebaja del impuesto PAIS para fletes del 17,5% al 7,5% que tuvo hasta el lunes.
El costo para la industria local
Sin embargo, el lado B de esta baja de precios por el fin del impuesto PAIS es el efecto nocivo que tendrá para la producción local, que ya sufrió este año las sucesivas etapas de apertura comercial impulsadas por Javier Milei.
Esto fue advertido por parte de la UIA, especialmente por Guillermo Moretti, vicepresidente regional de la entidad y referente del sector que nuclea a las empresas pymes, abocadas al mercado interno.
"Desde la UIA hicimos el planteo de que no se lo saque, porque era una barrera" para la producción local argentina, reveló Moretti este martes en diálogo con Habrá Consecuencias por El Destape AM 1070.
Al respecto, Moretti advirtió que el fin del impuesto PAIS "va a traer mayor cantidad de productos terminados y menos mano de obra para Argentina". "Tenemos que ver las consecuencias. Deja menos valor agregado, más expulsión de mano de obra y más pérdida de dólares", explicó, debido a la apertura de las importaciones.
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