El Banco Central bajó la tasa y aceleró la licuadora de Milei

La licuación de salarios impide cualquier gasto que pretenda el Gobierno, ya sea dolarizarse o comprar artículos suntuarios para ganarle a la inflación. 

25 de abril, 2024 | 16.38

El Banco Central dispuso este jueves una nueva baja de la tasa de interés de referencia, la segunda en 15 días, de 70 a 60 por ciento, lo cual se replicará en los rendimientos de los plazos fijos. La primera impresión es que bajará el incentivo para el ahorro bancario y estimulará la demanda de dólares. Pero también busca incentivar el consumo vía crédito, ante la baja de tasas. Sin embargo, la licuación de salarios impide cualquier gasto, como dolarizarse o comprar artículos suntuarios para ganarle a la inflación. 


El otro impacto viene del lado de la recaudación, dado que la falta de pesos de la población que podría recibir en intereses son usados no solamente para comprar dólares sino también para pagar impuestos. De acuerdo con el último informe monetario, a precios constantes y sin estacionalidad registró una retracción del 0,5 por ciento mensual, que estuvo explicada fundamentalmente por la dinámica de los depósitos a la vista remunerados.

La tasa de interés es parte esencial del valor de la moneda, especialmente en su comparación con otras divisas. Cuando se hace referencia a algún atraso cambiario y el precio del dólar futuro se toma en cuenta la tasa implícita. Sin una baja significativa de la inflación, que todavía se ubica en dos dígitos, reducir anticipadamente y en dos oportunidades la tasa de interés que rige la economía sólo tiene la intención de un traspaso forzoso de fondos de aquellos que tienen algún resto al dólar y así poner a competir ambos signos monetarios (no en igualdad de condiciones). 

Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Para el resto de la población, una enorme mayoría que no accede a otro tipo de alternativas, sólo se licúan los salarios y los ahorros, debilitando aún más el poder de compra del peso. Esto ya comienza a verse en la caída del consumo y en la baja que se registra mensualmente en menores ventas y recaudación.  Las ventas minoristas pymes cayeron 12,6 por ciento interanual en marzo. En la comparación mensual, disminuyeron 3,2 por ciento, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

La respuesta oficial es que la reducción en la tasa de interés impacta en los programa de ventas en cuotas, beneficiando a los consumidores que realizan compras en 3 y 6 cuotas fijas, en momentos en que recrudece la recesión. Pero la licuación de los últimos meses fue mucho más fuerte y la incertidumbre del rumbo económico todavía peor (si se va a mantener el trabajo, por ejemplo).

Además, las familias ya están muy endeudadas, al igual que las empresas pequeñas (la contracara de licuar a los ahorristas y los pasivos remunerados del BCRA, es otorgarle una tasa de interés negativa frente a la inflación a las pymes que tomen créditos a futuro). Pero la eliminación de límites al cobro de intereses punitorios los castiga aún más.  Y en el caso de las empresas, la solución es mayor consumo interno.

 

En simultáneo, el Central dispuso la desregulación de tasas mínimas de interés, lo que implicó la eliminación de la tasa mínima de plazo fijo que establecía la entidad para minoristas, por lo cual los bancos pueden fijar su propio rendimiento de estos instrumentos. 

Si bien es cierto que las tasas se mantienen en zona negativa si se las compra con la inflación, el rendimiento se sostiene muy por encima de la suba del dólar, tanto oficial -que avanza a un ritmo del 2 por ciento mensual. como de los dólares paralelos. Es allí donde el Gobierno busca que la brecha se convierta en el atractivo para una dolarización de hecho. Insistimos: de quienes tienen un excedente. 

Por otra parte, la reducción de la tasa de interés favorece además las cuentas del Banco Central ya que pagará menos interés por los pasivos remunerados, uno de los principales desvelos de Milei y su equipo económico.