La Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) redujo hoy a la baja sus previsiones de demanda de petróleo para el segundo trimestre del año a causa, especialmente, de las restricciones por los rebrotes de coronavirus en China, aunque mantuvo sus estimaciones para 2022 en su totalidad en base a lo que espera que será un mayor crecimiento económico en la ultima parte del año
En su reporte mensual del mercado de petróleo, la OPEP subrayó la incertidumbre de la economía con un debilitamiento del crecimiento por el alza en las commodities y los rebotes de (la variante) Ómicron en el comienzo del año.
En ese sentido, las restricciones y confinamientos en partes de China provocaron una modificación a la baja en la perspectiva de demanda para el segundo trimestre en el último informe de la OPEP, aunque el crecimiento previsto para todo el año se mantuvo sin cambios.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Esto último se debe a que el cartel petrolero se mostró optimista por la demanda a partir de la finalización del segundo trimestre, especialmente por el rebote en el transporte y el turismo en el verano boreal, que se encontrará motorizado por los ahorros acumulados en las economías avanzadas.
De esta forma, se espera que el consumo global de petróleo crezca 3,1 millones de barriles al día para promediar los 101,8 millones durante la segunda mitad del año, superando así los niveles previos a la pandemia.
Estos datos manejados por la organización de productores sirvieron como marco para que, a principios de este mes, los trece miembros acordaran incrementar el bombeo de crudo más de lo previsto originalmente, sumando 648.000 barriles diarios por mes durante julio y agosto en lugar de 432.000, una meta que, no obstante, podría no ser cumplida ya que el propio reporte mostró que los 13 miembros tuvieron dificultades para incrementar su producción en mayo.
Sin embargo, la OPEP se mostró cauta en sus proyecciones por el contexto mundial.
Los desarrollos geopolíticos de la actualidad y la incertidumbre del desarrollo de la pandemia continúan representando un riesgo considerable al pronostico de retorno a los niveles de pre-pandemia, advirtió la OPEP.
Del mismo modo, para el año próximo, según proyecciones difundidas por la agencia de noticias Bloomberg, se espera una fuerte ralentización tras el rebote de 2021 y 2022, con una expansión en el consumo que rondaría los 1,8 millones de barriles diarios, en lugar del alza de 3,4 millones del corriente.
En cuanto a la producción, la Argentina fue el país con mayor revisión al alza frente a la proyección previa de mayo- para este año, incrementándose su estimación anual en 33.000 barriles diarios.
Con información de Télam