El precio del barril de petróleo cayó hoy en Nueva York después de que los serios conflictos políticos desatados en varios países de Oriente Medio no afectaran las exportaciones de crudo.
A esto se sumó la presunción de los operadores de que finalmente habrá un acuerdo nuclear entre Irán y Occidente, lo que permitiría aumentar la oferta global de petróleo.
El barril de la variedad WTI cayó 5,1% al negociarse en 92 dólares; mientras que el tipo Brent bajó 5,4%, en 99,50 dólares, según cifras suministradas por el New York Mercantil Exchange (NYMEX).
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Los enfrentamientos en Bagdad aún no han afectado la producción de petróleo de Irak, lo que calmó las preocupaciones iniciales de los operadores de que una importante fuente de suministro podría verse afectada.
Tampoco se vio afectada la producción de crudo en los campos petroleros de Libia, luego de los fuertes enfrentamientos entre rebeldes y tropas leales al gobierno.
De esta forma, el mercado del crudo superó las preocupaciones registradas en los últimos días respecto a la posibilidad de que una recesión global desacelere la demanda de petróleo, según un reporte de la agencia Bloomberg.
El crudo revirtió las ganancias del lunes por la noticia de que Irak mantendrá abiertos sus puertos de exportación a pesar de que persisten los principales disturbios políticos.
El mercado se encuentra a la expectativa de la próxima reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, del próximo lunes, en la cual se presume que el cartel disponga un recorte en la producción, para mantener los precios en torno de la cota de 100 dólares.
Arabia Saudita ya anticipó que pondrá sobre la mesa la iniciativa de recortar la producción ya que considera que los precios no responden a los fundamentos del negocio petrolero.
Irak tiene la capacidad de impulsar las exportaciones a todos los destinos y no rechazará ninguna solicitud de más petróleo.
Los inversores vigilan las negociaciones entre Irán y Occidente para alcanzar un nuevo acuerdo nuclear que se cree inminente y que permitiría a Teherán volcar al mercado unos 2 millones de barriles diarios, lo que ampliaría la oferta global de crudo y reduciría los precios.
Los contratos de futuros de gas natural cerraron con una baja de 3% y se negociaron en 9 dólares por millón de BTU.
Finalmente, el oro bajó 0,8% y se pactó en 1.735 dólares por onza.
Con información de Télam
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