Este lunes se viene un nuevo golpe al bolsillo de las y los argentinos, ya que aumentarán, una vez más, los combustibles. Desde el próximo lunes 1° de abril la nafta súper pasaría a costar alrededor de $840, por lo que llenar un tanque superará los $35.000. Por este motivo, se espera que durante el fin de semana, que será de seis días debido a la conmemoración de Semana Santa, se registren largas colas en las estaciones de servicio.
El aumento es de alrededor del 5%. La suba se debe a un nuevo incremento en el impuesto a los combustibles líquidos (ICL), que fue autorizado por el gobierno de Javier Milei. Las empresas refinadoras como YPF, Shell, Axion y Puma Energy decidieron trasladar dicho aumento al precio final de los combustibles.
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Vale remarcar que, si bien cada una de las petroleras determina independientemente el aumento, YPF es la que fija el porcentaje de aumento. El sitio web Surtidores se indica un valor para la nafta súper en YPF de $800 en la Ciudad de Buenos Aires, por lo que un aumento del 5%, llevaría ese valor a $840. De esta manera, llenar un tanque de 42 litros costaría $35.280.
Para la nafta Premium, los valores irían de los $990 que cuestan en la actualidad a los $1.040 que pasaría a costar desde el lunes. El mismo tanque mencionado previamente tendría un valor de $43.680. En tanto, el gasoil costaría $885 contra los $843 que vale hoy. Finalmente, un tanque de 42 litros de gasoil se iría a $37.170.
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Las empresas piden más subas
Los representantes de las empresas petroleras reclaman un aumento de por lo menos 10% del precio de los combustibles. En reuniones con autoridades de Energía y contactos informales en encuentros de lobby energético y empresarial alzaron su voz para que se actualice el valor porque “está atrasado”.
De esta manera, en mayo también habrá un ajuste pendiente por impuestos y luego, según anticipan en Energía, el plan es ajustarlos mensualmente en línea con la inflación. “Creemos que hay un atraso de 10%”, insisten los empresarios del sector que atan principalmente el cálculo al valor del tipo de cambio. Ese incremento piden que se sume a los ya efectuados desde diciembre porque, argumentan, no llega a equiparar a los valores internacionales. Desde que asumió Milei el combustible subió 37% en diciembre, 26% más en enero, 6,5% en febrero y 7,5% en marzo.
Uno de los reclamos acercados a los funcionarios es la salida del cepo cambiario. Las multinacionales quieren ingresar y sacar los dólares libremente. “Este Gobierno tiene cepo cambiario y a las importaciones con el Bopreal”, interpretan. “Las reformas que tiene que hacer el Banco Central deben permitir acumular reservas y que nos den las divisas cuando las necesitemos”, expresa.
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