Javier Milei le hará perder al menos 23 millones de pesos a cada mujer que no podrá jubilarse con la moratoria

La eliminación de las moratorias afecta mucho más a mujeres que a hombres, y esto se debe a que en el mundo del trabajo persisten desigualdades de género que condicionan las trayectorias laborales.

15 de marzo, 2025 | 20.29
Javier Milei le hará perder al menos 23 millones de pesos a cada mujer que no podrá jubilarse con la moratoria Javier Milei le hará perder al menos 23 millones de pesos a cada mujer que no podrá jubilarse con la moratoria

Cada mujer que no podrá jubilarse vía moratoria perderá casi 23 millones de pesos en los próximos cinco años, producto de la no renovación del plazo que vence el 23 de marzo. La eliminación de las moratorias afecta mucho más a mujeres que a hombres, y esto se debe a que en el mundo del trabajo persisten desigualdades de género que condicionan las trayectorias laborales.

Una vez más, las mujeres otra vez variable de ajuste de Javier Milei. Con el paso de moratoria a la Pensión Universal del Adulto Mayor (PUAM), ocho de cada 10 mujeres tendrán que esperar cinco años más para poder acceder a una pensión. Según estimó la economista Mercedes D'Alessandro, en los cinco años de espera adicional, al valor de hoy fijo, son 22.750.000 de pesos que pierde cada una.

La PUAM está destinada a las personas mayores de 65 años que no cuentan con ninguna jubilación ni pensión. Es por medio de esta asistencia que el organismo previsional otorga un monto equivalente al 80 por ciento de una jubilación mínima.

El recorte de Milei a la moratoria en números

Según la fundación Éforo, de los 7.278.830 beneficios de jubilaciones y pensiones otorgadas en 2024 por la Anses, el 59% se deben a la implementación de las moratorias. De las 5.630.923 jubilaciones, el 65,5% se explican por vía de moratoria. En 2024, de las 427.505 nuevas altas de beneficios jubilatorios de ANSES, el 73% se explica por la moratoria.

Las moratorias tienen un rol importante en lo que respecta a la cobertura del sistema previsional. Son una respuesta al proceso de precariedad laboral que ningún gobierno pudo remediar, una consecuencia directa de que en Argentina, el 50% de la economía es informal. De suspenderse las moratorias, ocho de cada 10 mujeres y siete de cada 10 varones, en el futuro inmediato, no accederían a un beneficio jubilatorio al incumplir los 30 años de aportes.

La responsabilidad de cumplir con los años de aportes ya no puede ser imputada a los trabajadores, sino a la expansión de la informalidad y a la falta sistemática de políticas de formalización y registración de empleo. Las políticas de formalización y la expansión del empleo registrado contribuyen a mejorar el financiamiento del sistema previsional. El sistema previsional está atravesado por problemas estructurales que afectan la estabilidad de los haberes y, por lo tanto, el nivel de vida de los adultos mayores. 

La precariedad social que pega en las mujeres

En el primer año de gestión de Milei, el producto bruto interno se contrajo un 1,8%. El freno de la economía se tradujo en que las personas desocupadas pasaron de ser 1,1 a 1,3 millones. Entre las ocupadas creció el porcentaje de no asalariadas (de 25,2% a 26,9%), de personas asalariadas pero que no están registradas (35,8 al 36,7% ) y de ocupadas que buscan más empleo (de 15,2% a 17,6%).

Con una inflación acumulada durante 2024 de 117,8% (173% si se considera la devaluación de diciembre de 2023), el salario real del sector privado registrado cayó 7%, el estatal 22% y el de las personas con trabajo informal al menos 19%. La transferencia de ingresos de trabajadores al capital fue de 19 billones.

Según los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (tercer trimestre de 2024), la brecha de ingresos entre población ocupada según los ingresos de su ocupación principal pasó del 21 al 27,8%. Es la más alta de los últimos seis años para el mismo trimestre. La brecha entre población asalariada mujeres y varones pasó del 21% al 26%, la de ingresos totales -contando ingresos no laborales- del 16,2% al 20,7%.

La brecha entre la población asalariada informal creció del 35,4 al 36,7%. La brecha en la tasa de desempleo entre mujeres y varones se duplicó y las mujeres jóvenes son la primera mayoría en el conjunto de desempleados.

Según un informe presentado por la Dirección Nacional de Políticas de la Seguridad Social (DNPSS) que analizó los aportes realizados al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) desde 1994 a la fecha, por quienes están próximos a alcanzar la edad legal mínima jubilatoria resulta evidente “la significativo dificultad de los trabajadores para alcanzar los años de servicios con aportes requeridos para acceder a la jubilación”, existiendo además “una importante brecha entre varones y mujeres”. 

Considerando tanto a quienes trabajaron en relación de dependencia -sector privado y público nacional y provincial-, como a trabajadoras de casas particulares, autónomos, monotributistas y monotributistas Sociales, el informe de Seguridad Social indicó que, en el caso de los varones en edad de jubilarse un 15% ya se encuentra jubilado, se le suma otro 27% que cumpliría con los 30 años de aportes (42% en total) y se podría agregar otro 8% que se estima que tiene probabilidades de acceder a un régimen provincial. En definitiva, “un 50% de los casos analizados alcanzaría un beneficio contributivo a nivel nacional y habría otro 50% que no podría acceder a un beneficio a la edad de 65 años”, es decir, no podrá jubilarse sin moratoria.