Las otras metas: la agenda ambiental que reclamó el Gobierno

El presidente Alberto Fernández abrió hoy el 141° período de sesiones ordinarias del Congreso Nacional. En un discurso en el que repasó los principales números de su gestión así como los temas más candentes de la coyuntura actual, habló también de la necesidad de preservar y valorar los recursos naturales estratégicos, con énfasis en estimular una producción que vaya de la mano de una mayor responsabilidad con el medio ambiente. 

En alrededor de dos horas de discurso el mandatario dijo que "se está trabajando para que los recursos naturales de la Argentina sean preservados, manejados y valorados como un recurso estratégico”. Y se refirió a los desafíos que presenta “la crisis climática en toda su magnitud”.  

En ese marco, retomó los lineamientos expresados en el llamado Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático al 2030 que reúne un conjunto de proyectos para el “desarrollo sostenible”, y destacó la necesidad de avanzar en poner “límites a la emisión de gases de efecto invernadero” y “dar respuestas a los sectores frente al cambio climático”.  Lay ley de Envases estuvo en el listado de los proyectos que remarcó como prioridades para el período legislativo de este año.

Agenda ambiental

“Queremos seguir con la Argentina avanzando hacia un desarrollo sostenido, potenciando la industria, redistribuyendo con equidad los ingresos, ampliando derechos y cuidando el ambiente”, expresó el presidente Fernández en su cuarta apertura de sesiones ordinarias, la última de este mandato.  En relación, se refirió a los proyectos que tiene en cartera para cumplir las metas asociadas a la preservación del ambiente, impulsando formas de producción más sustentables y atendiendo las demandas de reducción de la contaminación en los procesos productivos. 

“En el 2022 elaboramos el Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático que sistematiza las políticas para lograr las metas definidas al 2030. Además, en cumplimiento del Acuerdo de París, nuestro país presentó la Estrategia de desarrollo resiliente con bajas emisiones a largo plazo que busca alcanzar la neutralidad de emisiones de gases de efecto invernadero en el 2050”, recordó el presidente de la Nación.

Dicho plan fue presentado en noviembre pasado y abarca unas 250 medidas que se desarrollarían a lo largo y ancho del país a partir de ejes de acción concretos: transición energética, productiva, movilidad sostenible, territorios sostenibles y resilientes, conservación de la biodiversidad y bienes comunes, y gestión sostenible de los sistemas alimentarios y bosques.

De acuerdo al Ejecutivo las políticas orientadas al sector productivo buscan “instalar nuevos criterios y financiamientos para que el desarrollo industrial sea sustentable, limitando las emisiones de gases de efectivo invernadero” a fin de “vincular la gestión del riesgo climático a la planificación productiva e impulsar la innovación de procesos”. 

Cabe recordar que el Acuerdo de París sobre el cambio climático fue firmado por los países en 2015 y establece una serie de metas de reducción de la emisión de carbono y los obliga a informar los avances en la materia. En 2021 nuestro país se comprometió a reducir el umbral de emisiones a 349 las emisiones de dióxido de carbono para el 2030. El Plan para enfrentar el cambio climático presentado por el Ejecutivo nacional tiene un costo total de aplicación estipulado en USD 185.500 millones.

Responsabilidad (y resistencia) empresarial

Este 1° de marzo, el presidente Fernández pidió al Congreso “avanzar en las leyes ambientales estructurales que establezcan los nuevos paradigmas del desarrollo sostenible”. Entre las prioridades para el año legislativo se refirió a la Ley de Envases con Inclusión Social, presentada en el 2021 por parte del oficialismo y con el impulso de la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores, que tras un primer avance positivo cosecho fuertes resistencias por parte de las cámaras empresariales respaldadas por Juntos por el Cambio.

"Vemos con preocupación que un sector minoritario de corporaciones insista con modelos de autorregulación empresarial en la gestión de envases que han demostrado su fracaso en Argentina y otros países del mundo", señalaron en su momento las cooperativas de cartoneros sobre el avance del proyecto que conlleva la responsabilidad del productor en materia ambiental. 

El proyecto de ley promueve una gestión ecológica de los envases dando cuenta del rol que les toca a las empresas al momento de introducir sus envases en el mercado, para evitar perjudicar al medio ambiente y a la salud de la población. Para ello promueve una tasa que penaliza a las firmas que utilicen envases no reciclables, de manera que asuman los costos de su accionar, al tiempo que recauda fondos para un sistema público de reciclado, con participación federal y de los actores involucrados en la gestión social de los mismos.

Este miércoles, coincidente con el Día Mundial del Recuperador Urbano, el presidente retomó la importancia de la iniciativa y pidió que el año electoral “no condicione la aprobación de proyectos que los argentinos necesitan”. 

Para cerrar, las iniciativas de la agenda ambiental incluyeron también el pedido de avanzar en la aprobación de la Ley de Humedales, lo que no es menor si se considera que Argentina registró 1,2 millones de hectáreas incendiadas en 2022, según datos del Ministerio de Ambiente nacional, con su impacto directo en los humedales y la actividad económica de las regiones afectadas, a lo que se suma las olas de calor y la sequía persistente.