Durante el período 2010-2015 el acceso a Internet de los hogares creció a un ritmo constante anual de 15 por ciento, a partir de planes oficiales que permitieron reducir la brecha digital y mantuvieron el acceso a la información como un bien social. En los cuatro años de macrismo, sumando todo el período hasta 2020, tan solo se llega al equivalente a un año de ejercicio del gobierno anterior. Con el macrismo apenas creció un 16,7 por ciento desde 2015, poco más de un 4 por ciento anual, según un relevamiento realizado por El Destape sobre datos oficiales, de las empresas y organismos de Naciones Unidas.
Las empresas de telecomunicaciones iniciaron el operativo clamor en contra de una mayor regulación del servicio en favor de los usuarios y como prenda de cambio azuzan con detener las inversiones. La idea que se replica a través de sus medios es que el servicio será a causa de la "intervención estatal" de peor calidad, más caro y de menor acceso para las familias.
El crecimiento exponencial en el acceso de la población a Internet hasta 2015, cuando aún era considerado un servicio esencial para la población, frente al desempeño en los cuatro años posteriores, tras la derogación macrista de ese marco legal, refuta claramente la idea de que el mercado desregulado es el que mejor asigna los recursos. En cinco años, entre 2010 y 2015, aumentó en 76 por ciento la penetración hogareña de Internet, mientras que en los cuatro años de Cambiemos fue de 16,7 por ciento, con un fuerte amesetamiento en los últimos dos.
“Ya no es posible la inversión si estamos sujetos a la arbitrariedad del poder de turno”, dijo esta semana Roberto Nobile, CEO de Telecom, en una entrevista a Forbes. El empresario confirmó que las inversiones previstas para los próximos años se congelarán a causa de la decisión del Gobierno de definir como servicio público en condiciones de mercado a la telefonía móvil, acceso a Internet y televisión prepaga (cable).
El decreto, que el Congreso deberá ratificar, permitirá controlar que no haya abusos por parte de las empresas para con sus usuarios, pero también abre la puerta a programas de estímulo para el acceso al servicio. Las empresas aseguran que el servicio será peor y menos accesible si no se permite el derrame del mercado.
Los datos de Global Internet Report publicados por Internet Society y de la Unión Internacional de Telecomunicaciones daban cuenta para 2015 de un nivel de penetración de Internet en el país del 59,9 por ciento de los hogares. El lanzamiento del Plan Conectar Igualdad fue clave en la reducción de la brecha digital. Hasta 2009 la penetración era del 34 por ciento de los hogares y en cinco años aumentó en 76 por ciento en el nivel de penetración hogareña.
En 2015 se registraban 30.151.231 puntos de acceso a Internet residenciales (6.354.330 fijos y 23.796.901 móviles) y en diciembre del año pasado la cifra ascendió a 35.192.365 accesos en hogares (7.000.588 fijos y 28.191.777 móviles), según el informe trimestral que realiza el INDEC. Esto equivale a un aumento de 16,7 por ciento durante los cuatro años de mandato Macri y con el artículo que declaraba servicio esencial a este rubro derogado por decreto.
También tuvo que poner el Estado
Este pésimo desempeño durante el macrismo tampoco evitó, otra de las críticas que se esgrimen desde el sector empresariado, que el gobierno no haya tenido que desembolsar recursos para las pocas obras de infraestructura que los privados no hacen.
A través del Ente Nacional de Regulación de Comunicaciones (ENACOM) el Estado invirtió durante el macrismo 4857 millones de pesos en conectividad, para llevar Internet a localidades del Interior del país, en asociación con cooperativas y pymes de telecomunicaciones.han sido socios estratégicos en la implementación de estas políticas que buscan conectar. También desplegó 4257 millones de pesos en fibra óptica. El gasto estuvo pero la mejora en el servicio no.