Las jubilaciones y pensiones aumentarán un 4 por ciento en septiembre como ajuste automático de la nueva fórmula que fijó el Gobierno, el cual se calculó tomando como referencia el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de julio, publicado por el Indec. Se espera que la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) haga oficial la suba en los próximos días. El aplanamiento inflacionario también congela la posibilidad de que los adultos mayores recuperen ingresos en medio de la crisis y la próxima suba no supera los 10 mil pesos.
Los nuevos montos mínimos y máximos serán los siguientes: la jubilación mínima será de $ 234.472, que es el valor que casi un 65% de los titulares del régimen general. Además, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) se actualizará a $ 187.578, mientras que las Pensiones No Contributivas (PNC) por Invalidez y por Vejez alcanzarán la suma de $ 164.130. Con los precios desacelerando a causa de la depresión económica, los incrementos serán cada vez más acotados y seguirán una curva de falsa estabilidad, ya que no está previsto otorgar una suba que recomponga la caída que produjo la megadevaluación de diciembre de 2023.
El Gobierno otorgó nuevamente en agosto el bono a jubilados y pensionados de $ 70.000, con el objetivo de que no pierdan ante la inflación. Este se acredita automáticamente junto a los haberes previsionales.
Si se repite en septiembre, la cifra de $ 70.000 les corresponderá a quienes cobren solo una prestación que sea menor o equivalente al haber mínimo. Mientras que los jubilados y pensionados que superen el monto de la mínima, recibirá el dinero que haga falta para completar los $ 304.472.
La oposición busca poner en jaque al ajuste de Milei y subir las jubilaciones
El Senado debatirá este jueves un proyecto para sancionar la nueva ley de movilidad jubilatoria. El texto, que ya fue aprobado en Diputados y recibió dictamen de mayoría en la cámara alta, pretende actualizar las jubilaciones por inflación y otorgar una compensación extra de 8,1 puntos.
El proyecto en cuestión reconoce una suba adicional de 8,1 puntos porcentuales correspondiente al aumento otorgado en abril, ya que el Gobierno otorgó por el mes de enero un 12,5% y la inflación de ese mes fue del 20,6%. De confirmarse, esto representaría un incremento de todos los haberes del 7,2% desde abril.
Otro de los puntos relevantes es que el haber mínimo no podrá estar por debajo del valor de la canasta básica total (CBT) para un adulto multiplicada por 1,09. Según las estadísticas disponibles, la CBT de junio fue de $ 282.578, por lo que la jubilación más baja debería ubicarse en los $ 308.010.
Además, el proyecto fija un plazo de seis meses para cancelar las deudas previsionales por juicios con sentencia firme y las contraídas a favor de las cajas provinciales no transferidas. Actualmente, la ley fija un plazo de 120 días para el pago de las sentencias firmes que no se está cumpliendo. Las cajas no transferidas son las de Córdoba, Buenos Aires, Chaco, Chubut, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, Misiones, Neuquén, Santa Cruz, Santa Fe, Tierra del Fuego y Corrientes.
Por otra parte, el proyecto establece que la actualización de las remuneraciones para el cálculo del haber inicial será mensual en lugar de trimestral. Según informó la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) "respecto a los haberes jubilatorios, al comparar el poder de compra promedio de siete meses de 2024 respecto de igual período de 2023 prevalece una caída real de 29,2% interanual; en tanto, los haberes mínimos (con bonos) perdieron 18,5% interanual".