El Gobierno ya puso en ejecución la nueva fórmula jubilatoria, la cual actualiza los haberes en función de la evolución de la inflación que mide el Indec, y en junio, más de 3,5 millones perderán frente al aumento del costo de vida. El sistema que impuso la administración de Javier Milei contiene una variable de ajuste oculta: el índice de precios nacional no es homogéneo para todas las provincias. Mes a mes, las regiones del país registran aumentos que varían respecto al promedio general. En junio se sentirá el efecto de este diagrama.
Las jubilaciones y pensiones aumentarán un 8,83 por ciento en junio como adelanto de la nueva fórmula de movilidad, que se calcula tomando como referencia el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de abril, publicado por el Indec. El 53,91 por ciento otorgado hasta el momento por ciento es el resultado de los porcentajes aplicados en el mes de abril: (27,40 por ciento, formado por un 12,5 por única vez, más un 13,24 por ciento correspondiente al IPC de febrero); mayo (11,01 por ciento correspondiente al IPC de marzo); y el aumento que se aplicará en junio (8,83 por ciento correspondiente al IPC de abril).
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La trampa detrás del índice de inflación para actualizar jubilaciones
El IPC que publica el Indec y que sirve de referencia para actualizar los haberes jubilatorios es el índice nacional promedio. Sin embargo, la inflación también se difunde por regiones: GBA, Pampeana, Noreste, Noroeste, Cuyo y Patagonia. Al revisar los reportes, la inflación acumulada a nivel nacional difiere de lo registrado en las zonas geográficas que componen la Argentina.
La inflación nacional de abril fue del 8,8 por ciento. Sin embargo, en el Gran Buenos Aires la suba fue del 9,2 por ciento y en el Noroeste fue del 9,1 por ciento. Esto quiere decir que, según cifras oficiales, 3.536.101 jubilados perderán cuando cobren el aumento el mes que viene.
Si la fórmula jubilatoria actual se hubiera aplicado desde el inicio de gestión libertaria, los jubilados del Gran Buenos Aires y de la Patagonia habrían visto ver caer sus ingresos en términos reales frente a la inflación. El contrapeso del resto de las regiones -donde la inflación fue menor al promedio nacional- no sería igualitario, ya que el balance del gasto previsional da a la baja. Solo basta con ver las cifras.
Según el último Boletín Estadístico de la Seguridad Social que difunde la Anses, en el GBA hay 2.604.019 jubilados y en la Patagonia 245.762 y en Cuyo 413.631. En total, el Gobierno hubiera pagado jubilaciones por debajo de la inflación regional a 2.849.781 personas. En cambio, sólo hubiera pagado por encima -bajo los mismos parámetros- a 2.299.203 personas.
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