El titular de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Alfredo González, desmintió la supuesta recuperación de la actividad pyme de la que hizo referencia el presidente Javier Milei. Así, se refirió a la caída en las ventas minoristas en los primeros meses del año: "Desde diciembre para acá la caída de las ventas minoristas fue abrupta".
"No hay recuperación de las ventas minoristas, para nada. Seguimos en caída", lanzó González, tras enumerar las cifras de retroceso que arrojó el primer trimestre del año en la comparativa interanual. "La caída en las ventas de las pymes fue de 28,7 por ciento en enero, de 25,8 por ciento en febrero y marzo, 12,6 por ciento", detalló en diálogo con El Destape Mundo AM 1070.
Milei sostuvo que la actividad económica ya evidencia signos de recuperación, aunque aclaró que esa mejora comenzará a notarse cuando se eliminen las restricciones en el mercado cambiario. En una entrevista a CNN, el mandatario sostuvo que para observar el repunte de la actividad económica primero deberán abrir el cepo y eliminar las restricciones del mercado cambiario, lo que -considera- dará lugar al rebote de la economía que “hará que se expanda fuertemente”.
"Desde enero de 2022 tenemos caída pero desde diciembre de 2023 fue mucho más fuerte", aseguró. "La mirada de la macroeconomía del Gobierno no es la misma que la de la economía real. Los aumentos tarifarios pegan muchísimo en las pymes", sostuvo el empresario, quien negó que haya una recuperación del sector a la vista. "Lo que vemos es que cae a un ritmo más lento, respecto de enero y febrero, entre otras cosas por la pérdida de poder adquisitivo de los salarios. No hay recuperación de las ventas. Los 12 puntos de caída de ventas es una cantidad enorme para el mundo pyme", afirmó González.
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El empresario pyme explicó que el traslado de cualquier mejora en la macroeconomía tarda mucho más para las pymes respecto de las grandes empresas. "Ya no tenemos costos fijos, todos variables. Los aumentos pegan en las finanzas de las pymes", afirmó el titular CAME. "Cuando el consumo interno cae nos pega de lleno a las pymes", agregó González.
El directivo reiteró que "es grave la caída de ventas de alimentos y fármacos". "La gente no está consumiendo. La concentración de producción es cada vez peor. Son 10 empresas que generan los precios base", marcó y denunció que "las empresas que forman precios siempre se protegieron con el dólar ilegal o financiero". "No es que las formadoras de precios bajan los precios por buenos, bajan porque están muy arriba", concluyó.
Informe de ventas
Las ventas minoristas pymes no pueden recuperarse y continúan en retracción, cayendo un 12,6 por ciento anual en marzo frente al mismo mes del año pasado, de acuerdo al relevamiento elaborado por la CAME. De esta manera, el Índice de Ventas Minoristas Pymes acumula una caída del 22,1 por ciento en el primer trimestre del año. En tanto que en la comparación mensual frente a febrero disminuyeron 3,2 por ciento.
Los números del tercer mes del año arrojan un recorte en el brusco retroceso que venían mostrando las ventas de las pymes, ya que en enero y febrero registraron una baja del 28,5 por ciento y 25,5 por ciento anual, respectivamente. Al evidente deterioro en el consumo, las pymes también están padeciendo los incrementos en las tarifas. En este sentido, desde CAME aseguraron que “los comercios están atravesando meses delicados, con pocas ventas y subas de costos”.
Al respecto, precisaron que “especialmente en marzo fue notorio el incremento de precios en los servicios públicos” y advirtieron que “aquellos locales más intensivos en el uso de energía, por ejemplo, como alimentos y bebidas, vieron saltar las cifras en sus boletas de luz”.
En relación a la notoria caída en las ventas, desde la cámara pyme explicaron que “las familias vienen cuidando fuertemente sus gastos incluso cuando hay opciones de pagos con tarjetas o en cuotas” y sostuvieron que “hay incertidumbre sobre cuánto durará la recesión y por eso prevalece la precaución al momento de comprar”.
En el análisis por rubro, seis de los siete sectores evaluados tuvieron disminuciones en comparación con el mismo período del año anterior. Solo el sector de textiles e indumentaria, con liquidaciones muy agresivas, escapó a la tendencia general y creció un 10,2 por ciento. La mayor retracción anual se detectó en Perfumerías (-27,5 por ciento).