La inversión pública y privada en la economía se desplomó 22,3% en abril según el indicador de la consultora Ferreres (OJF) y Argentina va a ser el país de la región que menos capitales productivos reciba este año y el próximo según el relevamiento que presentó el Instituto Internacional de Finanzas (IIF), en el marco de una recesión económica que todavía no encontró el piso de actividad y las dudas que genera el ajuste fiscal que lleva adelante la administración de Javier Milei.
También se conoció el informe de inversiones que elabora el Banco Central y que mostró un incremento de la inversión extranjera, pero en el último trimestre del año pasado, antes de que impacte el resultado electoral.
Según el BCRA, en el cuarto trimestre de 2023 se observaron ingresos netos de inversión extranjera directa en Argentina por US$ 6.557 millones. Los mismos estuvieron explicados principalmente por las transacciones de deuda (US$ 3.750 millones), seguido por la reinversión de utilidades (US$ 2.357 millones). En términos interanuales, la entidad monetaria destacó que se evidenció un incremento de los ingresos netos de US$ 6.420 millones.
La complejidad de la situación económica y política local llevó a que el país salga del radar de los inversores, hasta ubicarse en el último lugar del lote de países de la región como receptor tanto en la economía real (definidos como Inversión Extranjera Directa IED) como de capitales financieros.
En el mercado esperan que con la aprobación de la ley bases impulsada por el Gobierno, cambie el clima y mejore la expectativa económica y con eso la llegada de inversiones.
Brasil lidera la recepción de flujos de capitales y según el informe del IIF “las entradas netas de capital de no residentes seguirán siendo sólidas en un contexto de vulnerabilidad externa limitada y perspectivas favorables de crecimiento del PIB real”.
Las perspectivas para los mercados emergentes se consideran más positivas en relación con las economías avanzadas según la evaluación del IIF y estima que “es probable que el crecimiento promedio de la producción de los mercados emergentes sea mayor y que los diferenciales de tasas de interés de los mercados emergentes se amplíen”.
La evaluación del IIF está alineada con el informe de la consultora OJF, que elabora un indicador de inversión que suele anticipar los resultados de las mediciones oficiales. El IBIM-OJF registró para abril una caída de la inversión de 22,3% interanual medido en términos de volumen físico (sin contar el efecto de la inflación) y acumula para el primer cuatrimestre una contracción de 20,8%.
En la medición en dólares, se estima una inversión de US$ 5.975 millones mensuales, según OJF
En la evaluación que hace la consultora, durante abril la inversión mostró una mejora respecto de marzo, pero continúa en niveles bajos, anotando una retracción de 22,3% en la comparación anual, y de 19,3% si comparamos con el promedio de inversión de la última década, excluyendo el 2020.
Entre los sectores, la construcción sigue siendo la actividad más perjudicada, mostrando un pasar muy malo, y la inversión en maquinaria desaceleró la caída respecto de marzo, pero sigue débil.
“Entendemos que el piso podría haber quedado atrás, pero esto en parte está condicionado a que el gobierno logre avanzar con dos puntos clave para impulsar a las inversiones, como la aprobación de la Ley bases y la unificación cambiaria”, evaluó.
En tanto, el BCRA destacó que los sectores que captaron mayores flujos de IED en el cuarto trimestre de 2023 fueron: “Industria manufacturera”, “Sociedades captadoras de depósitos, excepto el Banco Central”, “Comercio al por mayor y al por menor, reparación de vehículos automotores y motocicletas” y “Explotación de minas y canteras”. En estos cuatro sectores se concentró el 93% de los flujos de IED del trimestre.
El principal origen de los flujos de IED fue Brasil, con ingresos netos por US$ 1.384 millones, seguido por Estados Unidos, con US$ 1.236 millones y España, con US$ 1.054 millones.
El presidente Javier Milei descalificó a dos de los tres presidentes de los países que más invierten en Argentina, Lula da Silva de Brasil y Pedro Sánchez de España. Con el tercero, si bien no agredió verbalmente al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se manifestó a favor de su opositor, Donald Trump.
Luego se ubicaron Suiza, con US$ 770 millones, Uruguay, con flujos netos por US$ 383 millones y Alemania, con US$ 331 millones.
La posición pasiva bruta de IED alcanzó los US$ 127.556 millones a fin del año pasado, con participaciones de capital de US$ 77.093 millones, e instrumentos de deuda por US$ 50.462 millones.