El presidente Javier Milei vuelve este sábado a subirse a un avión para encarar su sexta visita, en nueve meses de mandato, a Estados Unidos, donde estará cinco días en distintas reuniones con funcionarios y empresarios del país del norte. En la agenda oficial que se conoció en las últimas horas no se encuentra prevista una reunión con representantes del Fondo Monetario.
El arribo Milei, junto con el ministro de Economía, Luis Caputo, a Nueva York será el sábado las 20 (hora argentina), pero la cita clave será el martes, cuando participe en la Asamblea General de las Naciones Unidas, espacio que el primer mandatario utilizará para cuestionar de manera directa el actual rol de los organismos internacionales.
El domingo, previamente, Milei se reunirá con periodistas del New York Times en la sede del periódico estadounidense, siguiendo con raid de entrevistas a medios afines. El lunes por la mañana disertará ante inversores y participa de la apertura de la jornada bursátil en la Bolsa de Valores de Nueva York, donde además realiza el tradicional toque de campana que indica el inicio de operaciones.
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Al mediodía volverá a verse con el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, a quien le abrió la puerta en el país para que pueda ofrecer su servicio de internet satelital. Luego participará de un encuentro con el Consejo de Relaciones Exteriores de Estados Unidos, donde diserta durante 10 minutos.
El martes al mediodía se reunirá con el vicepresidente de Política Global y Asuntos Gubernamentales de Google, Karan Bhatia. A las 16.30 finalmente expondrá por primera vez en el Debate General de la 79° Asamblea General de las Naciones Unidas. En ese marco, tendrá una reunión bilateral con el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.
El miércoles por la mañana arriba nuevamente a la Argentina. El viaje tiene lugar mientras crecen los interrogantes en torno al inicio de la negociación con el Fondo. La discusión por un nuevo programa, que sería el tercero en seis años, ni siquiera se inició mientras que la Argentina sigue sin cumplir con las metas de acumulación de reservas y competitividad del tipo de cambio que le exige el organismo.