A partir del descongelamiento de impuestos y la desregulación del sector, los precios de los combustibles se dispararon abruptamente y para marzo se espera un nuevo sacudón. Hoy, la nafta súper y el gasoil operan ya en los 1000 pesos. Todo esto en medio de una fuerte caída del nivel de actividad. La consecuencia de este período de estanflación, que promueve el gobierno de Javier Milei, es una fuerte caída en la venta de combustibles, la más pronunciada desde febrero de 2021 (en plena pandemia).
En enero, tras la liberalización realizada por el nuevo gobierno, se vendieron en todo el país unos 1.466.485 metros cúbicos de combustible al público, entre naftas y gasoil, lo que implicó una contracción del 5,8 por ciento interanual y del 7,5 por ciento frente a diciembre.
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“El inicio del año exhibió un panorama altamente negativo a lo largo del territorio nacional: solo una de las veinticuatro jurisdicciones sub-nacionales exhibió incrementos interanuales, un escenario que no se veía desde febrero de 2021. Esa única suba se registró en CABA con 6,7 por ciento”, detalló un informe de la consultora Politikon Chaco. La situación seguirá empeorando.
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La semana pasada el Gobierno confirmó que descongelará dos impuestos que impactan en los combustibles y cuyo cobro estuvo suspendido por el lapso de dos años. Se hará en tres tramos: 1 de marzo, 1 de abril y 1 de mayo las fechas en las que se eliminarán en cuotas los impuestos prorrogados. Todos estos movimientos impactarán en los valores de todo el rango de combustibles.
Los precios
De acuerdo con un informe de la Fundación Colsecor, solo en la primera semana del año el precio de la nafta en el Interior del país fue del 87,3 por ciento respecto de diciembre. "Al indagar en el litro de nafta, se observa que su valor promedio fue de 792,3 pesos, cifra que mostró una diferencia del 13 por ciento con CABA, donde se encontró a 699 pesos", señala el documento. En relación al mes anterior, se registró un incremento del 87,3 por ciento en las localidades, mientras que en CABA el incremento fue del 26,4 por ciento
Si se compara con igual mes del año pasado (primera semana de enero 2023/ primera semana de enero 2024), la suba fue de 328,7 por ciento. Siete de los lugares que relevaron este producto registraron un valor por debajo del precio de referencia de la Ciudad Autónoma.
"Esta diferencia implicó que la nafta volviese a situarse un 13% más cara en las localidades que en CABA”, indicó el economista Gerardo Sánchez, asesor de la Fundación.
Las ventas por jurisdicción
En referencia a sus desempeños, las naftas exhibieron una baja del 6,3 por ciento interanual (con tracción de la premium que cayó 22,7 por ciento frente a una leve suba del 0,1 por ciento de la súper); a su vez, el gasoil mostró una baja del 5,1 por ciento con caídas en ambos segmentos (-3,8 por ciento el común y -7,5 por ciento el premium). En este último caso, pese a que comenzó la cosecha gruesa.
Salvo en la Ciudad de Buenos Aires, en las 23 provincias las ventas de combustibles se contrajeron: las caídas más leves se observan en La Pampa y Río Negro, con apenas el 0,4 por ciento cada una; en el otro extremo, Formosa (-16,1 por ciento) y Misiones (-19,3 por ciento) mostraron los retrocesos más significativos, señala el informe de Politikon.
En cuanto al tipo de combustible, en 22 de las 24 jurisdicciones subnacionales las naftas dominaron las ventas por sobre el gasoil, en términos de volumen, al igual que se observa para el total nacional.
En CABA se verifica la mayor concentración de ventas de naftas (agrupada la súper con la ultra) con el 74,6 por ciento de su total de volumen comercializado mientras que Santa Fe exhibe la menor participación entre los distritos con naftas como predominantes (51 por ciento). Por su parte, en apenas dos provincias fue el gasoil (también agrupado en común y ultra) el que registró el mayor volumen de venta: La Pampa (54,7 por ciento) y Mendoza (57,5 por ciento).
Participación en el mercado
En enero, la empresa YPF concentró el 58,3 por ciento del total de las ventas, seguida por Shell con el 20,7 por ciento y Axión (PAE) con el 11,6 por ciento. El resto de las empresas participaron del 9,3 por ciento de las ventas del mes. En términos relativos, el volumen comercializado por YPF exhibió una expansión del 2,9 por ciento interanual, mientras que Shell cayó 15 por ciento y en Axion la baja fue de 14,3 por ciento.
Por su parte, el resto de las empresas exhibieron una contracción de 18,8 por ciento en sus ventas agrupadas.
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