El Sindicato de Peones de Taxis (SPT) de Capital Federal alertó que el salario de esos trabajadores cayó 41% en el último año y denunció que pese al reciente aumento en la bajada de bandera "la recesión ya se ve en las calles" y un chofer debe laborar "un promedio mínimo de 12 horas diarias para pelearle al costo de vida".
El gremio expresó la necesidad de que "se achique la inflación porque si los porcentajes crecen, la crisis pegará de lleno". Asimismo, el sindicato que integra la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), manifestó su "preocupación por la pérdida salarial que vive el sector de taxis, que tuvo una caída del 41% en el último año" incluso teniendo en cuenta el último aumento en la bajada de bandera que la situó en 657 pesos, mientras el incremento de esa tarifa para marzo sería de 30%.
El sindicato aseguró que un peón de taxi en la Ciudad de Buenos Aires cobra un básico de 347.697 pesos, lo cual "no cubre los actuales niveles de costo de vida de una familia". Jorge García y Miguel Ángel Soto, secretarios General y Adjunto respectivamente, indicaron en un comunicado: "Estamos trabajando para revertir este desfasaje que golpeó duro por el brote inflacionario en los últimos meses por los aumentos".
Destacaron que "el impacto golpea también a la rentabilidad empresaria, y no podemos permitir que crezca la brecha", a lo que se suman "las últimas subas de los combustibles que se sienten". El gremio consideró que "primó la racionalidad" con la decisión votada por los diputados para que la ley "Bases" regrese a comisiones porque "descomprime la presión social".
"Estuvimos presentes en la calles junto a los gremios hermanos de la CGT haciendo oír nuestro rechazo a lo que consideramos que es un atropello de Javier Milei a la ciudadanía", recordaron sobre el paro del 24 de enero. Y agregaron que "continuaremos defendiendo la actual Ley de Contrato de Trabajo o luchando contra cualquier interés que impulse una reforma laboral que precarice la condiciones de vida de los trabajadores".