La inflación dentro del territorio de la Ciudad de Buenos Aires fue de 13,2 por ciento en marzo respecto al mes previo, con una leve desaceleración respecto de febrero, levemente por debajo del 14,1 por ciento de febrero, según las mediciones de la Dirección de Estadísticas y Censos porteña. La cifra se ubica lejos de los anticipos oficiales a nivel nacional para el tercer mes del año, el cual el Ejecutivo sostiene se ubicaría en torno al 10 por ciento. Más allá del dato mensual, se mantiene una aceleración en la medición interanual de 20,8 puntos porcentuales, para ubicarse en 285,3 por ciento. Y, además, se destacan alzas acumuladas en este 2024 muy por encima del promedio, entre 300 y 500 por ciento: dentro de rubro alimentos, pan, cereales, leche, huevos, frutas, verduras y azúcar; en servicios, el costo de la energía eléctrica, medicamentos y cuidado personal.
Desde el Gobierno se anticipó en los últimos días que la inflación de marzo habría arrojado una suba en torno al 10 por ciento; e incluso se hizo referencia a inflación núcleo de un dígito. La información privilegiada sobre el relevamiento del INDEC, aunque las estimaciones de precios privadas y la publicación del ente estadístico porteño, que coinciden en un piso del 13 por ciento, apuntalados por la escalada de alimentos y de los servicios regulados. A los aumentos de naftas, prepagas, luz, colegios privados, transporte, alquileres y taxis, con alta incidencia en la canasta básica, se suman los alimentos.
El índice porteño suele ser un anticipo concreto de lo que pueda arrojar la inflación del INDEC a nivel nacional, aunque las últimas mediciones mostraron un diferencial con la medición porteña. La inflación en la Ciudad de Buenos Aires viene arrojando aumentos superiores a los movimientos a nivel nacional. Durante marzo la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a las subas en las siguientes divisiones: vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, alimentos y bebidas no alcohólicas, Salud, Información y comunicación y Educación.
La inflación desagregada por rubro
En términos interanuales, las principales divisiones que explicaron la inflación minorista fueron alimentos y bebidas no alcohólicas; vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles; transporte y restaurantes y hoteles.
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El segmento alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 11 por ciento. Al interior de esta división, los principales impulsos provinieron de leche, productos lácteos y huevos, carnes y derivados, verduras, tubérculos y legumbres y pan y cereales.
- Pan y cereales: 8,8 por ciento mensual y 375,8 por ciento interanual.
- Carnes y derivados: 9,4 por ciento mensual y 286 por ciento interanual.
- Pescados y mariscos: 6,6 por ciento mensual y 329,4 por ciento interanual.
- Leche, productos lácteos y huevos: 18,2 por ciento mensual y 352,6 por ciento interanual.
- Aceites, mantecas y otras grasas: 8,2 por ciento mensual y 372,4 por ciento interanual.
- Verduras, tubérculos y legumbres: 22,4 por ciento mensual y 300,7 por ciento interanual.
- Azúcar: 7,3 por ciento mensual y 369,2 por ciento interanual.
- Bebidas no alcohólicas: 8,9 por ciento mensual y 390 por ciento interanual.
El rubro Salud se encareció 16,9 por ciento, por ajustes en las cuotas de la medicina prepaga. No obstante, también se acumulan fuertes incrementos en medicamentos y productos medicinales.
- Medicamentos: 11,3 por ciento mensual y 375,6 por ciento interanual.
- Productos medicinales: 8 por ciento mensual y 375,8 por ciento interanual.
- Artefactos y equipos terapéuticos 7,8 por ciento mensual y 264,2 por ciento interanual.
En concepto de información y comunicación se registró un aumento de 24,5 por ciento, con lo cual acumula un alza de 326,1 por ciento, "debido a los incrementos en las tarifas de los servicios de comunicación agrupados y de telefonía móvil", señala el informe oficial de CABA. Educación promedió un alza de 36,8 por ciento, como resultado de las subas en las cuotas de los establecimientos de enseñanza formal.
En el caso de aumentos en vivienda, agua y electricidad, impactaron principalmente los ajustes en los valores de los gastos en vivienda, agua, electricidad y gas, con fuerte incidencia del arrastre estadístico que dejó la actualización de las tarifas residenciales del servicio de energía eléctrica del mes previo.
- Electricidad: 48,8 por ciento mensual y 493,9 por ciento interanual.
- Muebles, accesorios y alfombras: 1,8 por ciento mensual y 307,1 por ciento interanual.
- Electrodomésticos: 2,5 por ciento mensual y 301,5 por ciento interanual.
A los aumentos de bienes y servicios para el hogar, se suman los ajustes autorizados (o desregulados) en naftas, transporte, alquileres y taxis, con alta incidencia en la canasta básica.
- Transporte: 8,5 por ciento mensual y 323,7 por ciento interanual.
- Adquisición: 4,8 por ciento mensual y 311,2 por ciento interanual.
- Servicios de transporte de pasajeros: 11 por ciento mensual y 329,9 por ciento interanual.
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