La inflación del 6,6% en febrero que difundió el Indec fue un cimbronazo para el Gobierno, que se encuentra acorralado por aumentos siderales que no parecen tener techo. Sin embargo, el dato más preocupante es que la suba en alimentos y bebidas fue la más alta de la que el organismo estadístico tenga registro en los últimos seis años.
Según las estadísticas oficiales, la inflación de febrero fue del 6,6% y en el primer bimestre del año acumuló una suba del 13,1%. Además, la medición interanual trepó al 102,5%, la cual registra un ascenso peligroso: había sido del 55,1% en marzo de 2022.
La división de mayor aumento en el mes fue alimentos y bebidas no alcohólicas (9,8%), principalmente por la incidencia que tuvo el alza de carnes y derivados y de leche, productos lácteos y huevos. En la medición que lleva adelante el Indec desde 2017, los alimentos marcaron el incremento más alto de toda la serie. El récord previo había sido marcado en febrero de 2022, cuando los efectos de la guerra en Europa dispararon los costos de los alimentos un 8,6%.
En detalle, fue la carne el factor que precipitó la catástrofe de precios. De acuerdo al Indec, el cuadril aumentó 34,3%, la nalga 32,8%, la paleta 33,5%, el asado 28,6% y la carne picada un 35%. Igualmente, por fuera de estos productos, el resto de los alimentos subieron muy por encima de la pauta marcada por el programa Precios Justos.
Los alimentos que más aumentaron en febrero
- Arroz blanco simple: 14,6%
- Huevos de gallina: 13,2%
- Queso cremoso: 9,9%
- Yogur firme: 9,9%
- Harina de trigo común 000: 7,6%
- Salchicha tipo Viena: 7,6%.
- Pollo entero: 6,8%
- Filet de merluza fresco: 6,8%
- Aceite de girasol: 6,6%
- Azúcar: 6,6%
El mal dato de febrero ya había sido advertido. El relevamiento de los 57 productos de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) que realiza el Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana mensualmente desde el Índice Barrial de Precios en 900 comercios de cercanía ubicados en 20 distritos del conurbano bonaerense, había anticipado que los precios de los alimentos en febrero aumentaron 13,85%. Esta cifra constituyó en la suba mensual más alta desde la crisis de principios de siglo, según el documento.
Una familia de cuatro personas –dos adultos y dos hijos- que en diciembre pasado necesitaba $ 64.134,25 para adquirir sus alimentos básicos, en enero precisaba $ 68.094,31, y en febrero $ 77.523,67 para obtener los mismos productos.
Qué pasó con el resto de los rubros
Por fuera de alimentos, los rubros con mayores aumentos fueron: Comunicación (7,8%), sobre la que incidió el alza de los servicios de telefonía e internet y restaurantes y hoteles (7,5%), por las subas en restaurantes y comidas fuera del hogar.
También se destacó en el período el aumento de: las cuotas de las prepagas, que impactó sobre salud (5,3%); cigarrillos, en bebidas alcohólicas y tabaco (5,2%); los combustibles, dentro de transporte (4,9%); y los servicios de electricidad y agua en algunas regiones, en vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (4,8%).
En tanto, las dos divisiones de menor variación en febrero fueron prendas de vestir y calzado (3,9%) y educación (3,2%). A nivel de las categorías, el IPC Núcleo lideró el aumento (7,7%), seguido de regulados (5,1%), en tanto que estacionales registró un incremento de 3,3%.