El Gobierno recibió a representantes de empresas, cámaras, sindicatos y productores de alimentos y de insumos no alimenticios, con quienes analizó el funcionamiento integral de la cadena de valor alimenticia para detectar anomalías que puedan incidir en la formación de precios. Según trascendió, se le pidió a los empresarios que presenten información adicional para poder determinar en qué lugar de la cadena se generaron los aumentos injustificados.
El objetivo de estos encuentros es alinear las expectativas de inflación en torno al 29% anual, de acuerdo a las pautas macroeconómicas dispuestas por el Ministerio de Economía, y que los salarios puedan aumentar en términos reales. La segunda reunión de la mesa de la cadena de alimentación, en el marco del acuerdo de precios y salarios, congregó en la sede del Ministerio de Desarrollo Productivo a representantes de empresas y cámaras de consumo masivo, y sumó a productores de insumos de la fase primaria, como fertilizantes y agroquímicos, y los de la fase industrial, como cartón vidrio, hojalata y todo lo vinculado a los envases de los productos.
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El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, estuvo acompañado por sus pares de Trabajo, Claudio Moroni; de Agricultura, Luis Basterra; la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont; el vicepresidente del BCRA, Sergio Woyecheszen; y la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca. También estuvieron presentes la secretaria de Comercio, Paula Español, y los secretario de Política Económica, Fernando Morra; de Agricultura, Ganadería y Pesca, Jorge Solmi; y de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional, Marcelo Alos.
Aumentos indebidos
“Hemos visualizado aumentos importantes en insumos de la fase primaria y de la fase industrial, que en principio no le encontramos justificación. En fertilizantes y agroquímicos, por ejemplo, registramos aumentos que son muy llamativos, de entre el 40% y el 60% en dólares”, explicó Kulfas. A su vez, aseguró: “Es necesario que asumamos compromisos cruzados. Si hay más consumo todos los que están aquí van a salir ganando”.
Según detalló el ministro, está previsto que el tipo de cambio tenga un alza del 25% en el año y que la inflación esté en el orden del 30%. Al respecto, destacó: “Después de un año en donde el precio de los insumos creció por encima del de los productos finales, sabemos que tenemos que ir hacia un sendero de recuperación de los márgenes de la industria alimenticia, sin que sea a costa de los consumidores y consumidoras.
En la primera reunión -que se realizó el jueves pasado- se consensuó trabajar en cinco ejes estratégicos para coordinar una expectativa inflacionaria que pueda converger con las metas establecidas en el Presupuesto 2021. Estos son: insumos alimenticios; insumos no alimentarios; costo logístico; el programa de Precios Máximos; y la productividad, relacionada con la negociación salarial.
Con esta hoja de ruta, en este encuentro se abordó el eje de insumos industriales no alimentarios, para analizar su evolución tanto del agro, como fertilizantes o productos químicos, como los de industria alimenticia, como envases o cartón.
En busca de un acuerdo
“Sabemos los problemas que tenemos en una economía que tiene una inflación alta desde hace mucho y por eso es necesaria esta instancia de trabajo. Solo con una coordinación fuerte lograremos soluciones que demandan los argentinos y las argentinas”, remarcó Todesca, y aseguró a empresarios y trabajadores: “Cuentan con nosotros, pueden llamarnos a todos los que estamos acá. Pongámonos a trabajar porque esto es en beneficio de todos”.
Por su parte, Español pidió hacer la siguiente distinción: “Una cosa son los insumos que se compran en dólares, porque son importados, y otra cosa es la dolarización de la producción. No es lo mismo que uno tenga un insumo importado y lo tenga que pagar en dólares, y otra cosa es que el producto esté dolarizado porque lo pueden vender en el exterior”.
En términos generales, los empresarios manifestaron su agradecimiento por la convocatoria, se mostraron predispuestos a colaborar y explicaron a qué problemas se enfrentan en cada una de sus industrias. Varios de ellos coincidieron en destacar, entre otros factores, el aumento de la demanda de productos de China, lo que elevó los precios internacionales; la capacidad instalada ociosa de sus plantas, que aún está alta; y, en algunos casos, mencionaron la menor oferta de empresas en el mundo que produzcan insumos.
Entre los actores más importantes del sector privado, estuvieron presentes los representantes de: Bayer-Monsanto, Syngenta, Aluar, Ternium Argentina, YPF, Quilmes, Morixe Hermanos, Ledesma, Nestlé, Mastellone, Molinos Río de la Plata, Paladini y Cattorini Hnos.