Un relevamiento realizado entre numerosos analistas nacionales e internacionales proyecta que la inflación cerrará 2024 con un descenso y una leve mejora respecto al pronóstico anterior, de un 226,5%. El panorama para 2025 es aún más alentador, con una inflación promedio proyectada en 60,5%, lo que marcaría una notable desaceleración respecto de los niveles actuales. Este optimismo responde a la moderación de las presiones inflacionarias gracias a una política fiscal más estricta y a la reducción del gasto público.
Sin embargo, FocusEconomics señala que algunos factores podrían mantener la inflación por encima de los niveles deseados. Entre ellos, destacan la necesidad de que el Gobierno reduzca subsidios y la depreciación del peso o devaluación. “Aunque el gasto en subsidios se ha recortado considerablemente, se requieren recortes adicionales para contener la inflación”, apunta el informe. Estas proyecciones provienen del FocusEconomics Consensus Forecast - LatinFocus, la edición de octubre de una reconocida encuesta privada sobre expectativas económicas.
A cuánto va a estar el dólar en 2025
De acuerdo a los analistas, el dólar oficial debería devaluarse un 15% en lo que resta de 2024, cerrando el año a $1.135 por unidad, y otro 41% en 2025, llegando a $1.605. Estos movimientos mensuales, de poco más del 2%, se alinean con la tasa de devaluación gradual o "crawling peg" fijada por el Banco Central, lo que sugiere que la mayoría de los expertos considera que esta política de ajuste cambiario continuará vigente.
Para el mercado paralelo, los analistas proyectan que cerrará este año en $1.311 y alcanzará los $1.644 en 2025, acercándose así al valor del mercado oficial. Estas cifras representan una baja en comparación con el pronóstico del mes anterior. Este optimismo sobre la estabilidad del tipo de cambio en torno al ajuste gradual del 2% mensual (crawling peg) sin una devaluación abrupta está acompañado por una perspectiva favorable en cuanto a la inflación.
Si bien la inflación seguirá siendo un desafío en el corto plazo, la expectativa de un dólar más estable y de políticas fiscales y monetarias que se sostienen estrictas brinda cierto alivio en el panorama.
Sin embargo, FocusEconomics señala que algunos factores podrían mantener la inflación por encima de los niveles deseados. Entre ellos, destacan la necesidad de que el Gobierno reduzca subsidios y la depreciación del peso. “Aunque el gasto en subsidios se ha recortado considerablemente, se requieren recortes adicionales para contener la inflación”, apunta el informe internacional.