La actividad industrial en la provincia de Buenos Aires logró sostener su nivel de crecimiento durante el primer cuatrimestre del año. En 2022, los sectores fabriles de esta jurisdicción, con actividades que van desde la refinación de petróleo, indumentaria y cuero, minerales no metálicos, automotores, tabaco entre otras, cerró con un alza del 5,5, mientras que, entre enero y abril de este año, el avance fue del 4,6% en la comparación interanual. Estos datos surgen del último informe del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina de la provincia. También se registró una suba del empleo privado registrado en el orden del 3,4% interanual. Sin embargo, en diálogo con El Destape, los directivos de la UIPBA señalaron que en las estadísticas de los próximos meses se apreciará un descenso de la actividad, “situación que se complejizó con la implementación de las últimas medidas económicas que encarecieron los fletes y algunos insumos importados".
Los sectores industriales de la provincia de Buenos Aires registraron en abril – último dato consolidado - un avance en la actividad del 5% en la comparación interanual y del 3,7% contra marzo de este año. En total, siete de los once sectores que componen el entramado productivo provincial presentaron resultados positivos.
“Las mayores alzas se registraron en Metales comunes, Refinación de petróleo, Minerales no metálicos, y Vehículos automotores”, puede leerse en el informe de la entidad fabril.
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Este dato se encuentra en sintonía con la información del avance de la actividad en relación al PBI para el primer trimestre del año. El Indec destacó que tanto el sector de los hidrocarburos como la industria automotriz lograron sostener el crecimiento del PBI en torno al 1,3% interanual.
En tanto, la UIPBA señaló que las principales caídas productivas estuvieron en los rubros “Prendas de vestir, cuero y calzado” y Papel cartón, seguido por Tabaco y caucho y plástico.
En el desagregado por sectores, la actividad de refinación saltó un 24% interanual, básicamente impulsada por la mayor producción de Vaca Muerta y su posterior proceso en las refinerías de la provincia.
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El sector de los hidrocarburos pisa cada vez más fuerte dentro de la economía provincial, incluida la posible producción offshore en escala. Por tal motivo, el gobernador Axel Kicillof insistió desde el comienzo de su gestión en que la provincia debía ser considerada una jurisdicción petrolera, con la intención de conseguir una silla permanente dentro de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI).
Por su parte, el rubro metales comunes avanzó un 15% durante el primer cuatrimestre del año, seguido por vehículos (11,5%), alimentos (4,1%), minerales no metálicos (3,7%) y máquinas y equipos (3,8%).
Estos datos son solo una parte de la película que finalizará en diciembre, cumplimiento del acuerdo con el FMI mediante. En este sentido, en el último informe del EMAE se destacó que para mayo hubo una caída acumulada de la actividad del 1,3%.
"La Provincia de Buenos Aires concentra el 49% de la producción de todo el país y tiene mucha diversidad respecto de los sectores productivos que componen el entramado industrial. Entonces, lo que pasa a nivel país es lo que pasa en la Provincia y viceversa. Cualquier medida que se toma en el plano nacional afecta de manera directa a la industria de PBA”, explicó Martín Rappallini en diálogo con El Destape.
A su vez, agregó que “las pymes se ven afectadas directamente por las últimas medidas adoptadas al cierre de julio que encarecieron los fletes de las exportaciones haciendo menos competitivas a esas empresas que tienen menor capacidad de reacción”. También destacó que la decisión del Ministerio de Economía, a cargo de Sergio Massa, pre candidato presidencial por UP, “hubo un encarecimiento del abastecimiento de insumos importados, sumado a la incertidumbre de si podrán conseguir los productos estratégicos para producir".
Más empleo pero falta
También hubo un avance en la creación de puestos de trabajo. En abril, la cantidad de asalariados privados en relación de dependencia, de todas las áreas productivas de la provincia de Buenos Aires, registró una suba del 3,4%. En total, se contabilizaron 67.000 puestos nuevos, de los cuales 39.000 correspondieron a la industria.
Entre 2019 y 2022, hubo un incremento del empleo industrial del 10,2%, de acuerdo al análisis realizado por la UIPBA. Se crearon 48.757 puestos.
En la industria textil, el empleo creció un 21,4% durante el período analizado, mientras que en el rubro automotores, el alza fue del 14%. En el segmento Maquinaria y equipo, la suba del empleo registrado fue del 11,8%, y en la industria alimenticia, del 7%.
Estos no son datos menores, teniendo en cuenta el impacto que tuvo la pandemia en el mundo laboral (2020-2021), sumado a la herencia macrista que dejó un desempleo del 8,9% a nivel nacional, y del 10,8% en los partidos del Gran Buenos Aires.
Según los datos del Indec, al cierre de 2022, la tasa de desocupación en la misma jurisdicción había descendido al 7,8%. De todas maneras, en la comparación con 2015, previo a la llegada de Macri y María Eugenia Vidal como gobernadora de la PBA, faltan recuperarse más de 14.000 puestos industriales.
El otro dato a tener en cuenta tiene que ver con el aumento de la informalidad laboral. A nivel nacional, el empleo registrado aumentó en 2022 un 3,4%, mientras que la precariedad laboral avanzó un 15%, situación que siguió incrementándose en los meses siguientes en las diferentes jurisdicciones del país.
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