Mientras el Gobierno pone todos los cañones en rebajar los aumentos en los productos de consumo masivo, otros rubros continúan empujando la inflación. La medicina prepaga, las telecomunicaciones y las tarifas elevaron el nivel general de los precios.
Para octubre, el índice de precios al consumidor se ubicó en un 6,3%, acelerándose marginalmente respecto a septiembre (0,1 punto más). Con este resultado, el incremento interanual alcanzó el 88%, el mayor valor en 31 años (en noviembre 1991 había sido de 91,3%). La inflación acumulada en el año asciende al 76,6%; y la alcanzada durante la gestión de Alberto Fernández alcanza un total de 262%.
En este caso, el rubro Comunicación fue el que más se incrementó en el mes (12,1%). El Enacom había autorizado a empresas de servicios de comunicaciones móviles a aplicar un aumento de hasta 19,8% en octubre y la segunda a partir del 1 de diciembre, que será de hasta 9,8%. Sin embargo, se especula con que el impacto sobre los usuarios fue aún mayor por la medida cautelar que habilita a las compañías a fijar aumentos de forma deliberada y desconociendo las regulaciones del Gobierno.
Por otra parte, la segmentación de subsidios en tarifas energéticas tuvo impacto del orden de 7,5%, afectando la evolución del rubro Vivienda, agua electricidad, gas y otros combustibles. A su vez, el rubro salud aumentó 7,1%, ya que en el mes impactó la actualización bimestral del orden de 11,5%.
Luego de las críticas realizadas por la vicepresidenta Cristina Kirchner por Twitter sobre la "francamente inaceptable" alza de las cuotas de las empresas de medicina prepagas, el Gobierno le dará un corte a partir de fin de año al esquema de actualización de precios. Según pudo saber El Destape de fuentes oficiales, el fin de la resolución que les permitió hasta el momento a las compañías de medicina prepaga aumentar por encima de la inflación no se pausará sino que directamente finalizará en diciembre y será reemplazado por una normativa conjunta entre el Ministerio de Salud y Trabajo que les dará potestad de permitir o no esos incrementos.
Qué pasó en octubre y que pasará con la inflación en los meses que vienen
El componente estacional del índice reflejó el mayor incremento: 9%, principalmente por aumentos en Frutas y Verduras. Mientras tanto, los estacionales aportaron 1,2 puntos al incremento total.
Los regulados fueron el único componente con aceleración respecto al mes previo, ubicándose en un 7,4%. Este incremento fue producto de aumentos en varias categorías: en servicios de telefonía e internet (+14%), prepagas (+11,5%), colegios privados (+10%), electricidad y gas (+9,2%) y combustibles (+5%).
De las 12 categorías que releva el índice, excepto por Restaurantes y Hoteles y los rubros regulados, todos los componentes del IPC desaceleraron respecto al mes anterior. Sobre este punto, se destacó indumentaria, con una variación del 6,8% contra el 11,7% de septiembre. A pesar del descenso, el Gobierno espera que el rubro muestre una disminución más importante, ya que firmó a principios de mes un acuerdo para congelar precios por 60 días. En lo que va del año, la suba acumualda para este segmento es del 103,1%.
En las primeras dos semanas del mes de noviembre, el relevamiento de precios de alimentos de la consultora LCG registró un aumento promedio del 0,9% semanal. Se trata de una tasa mensualizada del 4,5% aproximadamente, lo cual marca una desaceleración sustancial respecto a los meses previos. Aún así, de convalidarse esta cifra, supondría un aporte de 1,3 puntos a la inflación general.
A esta suba se sumarían los incrementos en electricidad (14,7%), gas (13% aprox), taxis (20%) y personal de casas particulares (9%). En total, estos incrementos sumarían otros 1,3 puntos sobre la inflación total.
Tomando en cuenta estos incrementos y una inercia que se sostiene alta, la inflación de noviembre podría llegar al 6% mensual. Con registros que difícilmente perforen estos niveles en el corto plazo, para diciembre la inflación podría ser del 100% anual, la que funcionará como piso para 2023.
El Gobierno apunta a reducir expectativas con Precios Justos
Para rebajar estas expectativas, el Gobierno lanzó el programa Precios Justos, que establece la fijación de precios de cerca de 2.000 productos de primera necesidad durante cuatro meses y un aumento máximo del 4% para otros 30.000 artículos durante el mismo período acordados entre la Secretaría de Comercio y las empresas y comercializadores minoristas.
El precio de los productos estará fijado de acuerdo al promedio de los valores de octubre y, sobre esa misma base, correrá el aumento del 4% para el resto de la canasta de productos sin fijar para las empresas participantes, lo que permitirá enhebrar una lógica de variación de precios similar para todo el sector y abordar de mejor manera las expectativas de inflación para los próximos meses.
Actualmente ya está disponible la aplicación para teléfonos móviles -Precios Justos, para teléfonos con Android y IOs- que ya tuvo más de 100.000 descargas en las últimas jornadas y que permite ver la lista de productos incluidos, lectura de códigos de barra y una opción para denunciar una diferencia de precios o faltantes.