Por menor compra de energía, en un año cayeron u$s 1500 millones las importaciones

Las importaciones de bienes en junio registraron una caída mensual medida de dólares el 3 por ciento respecto a mayo y de 17 por ciento interanual. Si se toma todo el primer semestre el retroceso ascendió a 9 por ciento respecto del igual período del año pasado, según el cruce de datos que realizó El Destape de fuentes oficiales. Teniendo en cuenta la clasificación por usos de Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la caída interanual se explica en mayor medida por las menores compras al exterior de combustibles y lubricantes, seguidas por las de bienes de capital y bienes intermedios. Se trata de un importante alivio a las castigadas reservas y un primer impacto positivo de la menor demanda de energía del exterior.

Si se analizan las importaciones en términos CIF (valor real de las mercancías durante el despacho aduanero) en junio de 2023 se estiman una erogación de casi 7161 millones, presentando un retroceso de 3 por ciento con respecto al total registrado en el mes previo, cuando había demando 7357 millones de dólares.

Si se desagrega por uso económico del INDEC, las importaciones de combustibles y lubricantes del resto de las compras de bienes al exterior se observa que, si bien las primeras alcanzaron en junio un valor similar al registrado en el mes anterior, presentaron una caída interanual de 50 por ciento. En términos concretos, dentro del total de importaciones, 1000 millones en junio último frente a los 2100 millones de igual mes del 2022. En cuanto al resto de las importaciones de bienes, éstas registraron una baja tanto con respecto al mes previo como en términos interanuales, de 4 por ciento y de 7 por ciento respectivamente. Es decir, en comparación a mayo pasó de 7400 a 7200 millones de dólares y respecto a junio del año pasado cayó de 8700 millones a 7200 millones de dólares.

Frente a un mayor control sobre las autorizaciones de compra al exterior, se observa que la caída de las importaciones de bienes de junio con respecto al mes previo estuvo liderada por las menores adquisiciones de bienes de capital, y de sus piezas y accesorios, siendo compensadas parcialmente por las mayores compras de bienes intermedios y de combustibles y lubricantes.

Con el objetivo de evitar un mayor freno sobre la actividad industrial, se privilegiaron las compras externas de bienes intermedios en términos mensuales, las cuales aumentaron en junio un 4 por ciento, al igual que combustibles y lubricantes 4 por ciento, por cuestiones estacionales.

En contraposición, se redujeron las importaciones respecto de mayo, siempre medidas en valor aduanero en millones de dólares, en vehículos automotores de pasajeros (-13 por ciento), bienes de consumo (-6 por ciento), bienes de capital (-10 por ciento) y piezas y accesorios para bienes de capital (-10 por ciento).

En términos interanuales, la caída de 17 por ciento mencionada anteriormente, se explica mayormente por las menores compras al exterior de combustibles y lubricantes, de bienes intermedios y de bienes de capital. En este caso, la baja registrada en bienes intermedios fue compensada parcialmente por las mayores compras al exterior de porotos de soja excluidos para siembra (comprendidos dentro de “Alimentos y bebidas básicos fundamentalmente para la industria”).

Esto último explica que, pese a la sequía que redujo el volumen de oleaginosos –aunque las grandes empresas mantienen 9000 millones de dólares en silobolsas—la industria molinera se mantuvo en elevados niveles. Entre enero y mayo de este año, la molienda de maíz para feedlots y granjas –forraje que sirve para alimentar las cadenas cárnicas - se incrementó un 25 por ciento con relación al mismo período de 2019, de acuerdo con cifras de la Bolsa de Cereales de Rosario.

Continuando con el cotejo interanual sobre la base de los usos económicos en los que divide el INDEC, dentro de bienes intermedios se destacan los descensos en alimentos y bebidas básicos para la industria (-8 por ciento) y alimentos y bebidas elaborados para la industria (99 por ciento). También hubo retrocesos en bienes de capital (-11 por ciento), equipos de transporte industriales (-5 por ciento) y de consumo (-8 por ciento).

De todos modos, ningún retroceso fue tan profundo como combustibles y lubricantes, con un retroceso de 50 por ciento interanual. Dentro de ese rubro, combustibles y lubricantes básicos cayeron 49 por ciento, mientras que los elaborados lo hicieron en un 15 por ciento. La importación de vehículos automotores de pasajeros se contrajo 15 por ciento interanual, siendo parte de la disputa interna en Brasil por menores ventas a la Argentina, principal mercado de destino de las exportaciones paulistas.

Por su parte, al realizar un análisis sectorial, se observa que los sectores Electricidad, Petróleo e Industria Química, Caucho y Plástico, son los que más contribuyeron al descenso interanual de las importaciones de bienes de junio. Por el contrario, se destaca que el principal sector en registrar una suba interanual en sus importaciones de bienes es oleaginosos y cerealeros, por las compras al exterior de porotos de soja).