La economía de Francia registra una ralentización mayor a la esperada por los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania, y ahora el Banco Central galo espera un crecimiento de sólo 0,25% durante el primer trimestre.
De acuerdo con un reporte mensual de expectativas realizado por el Banco de Francia, se espera que la economía del país sólo crezca 0,25% durante los tres primeros meses del año, la mitad de lo que se estimaba el mes pasado, y coloca un manto de dudas sobre la meta oficial de lograr un avance del 3,9% durante este año.
En 2021, con la desescalada de la pandemia de coronavirus y tras una caída del 8% en 2020, el Producto Bruto Interno (PBI) francés había rebotado un 7%, por encima del promedio de la Eurozona y el mayor porcentaje desde 1969; y, al igual que en países como la Argentina o Italia, fue más fuerte que las previsiones originales.
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No obstante, el crecimiento ya había comenzado a perder fuerza durante el último trimestre de 2021 con un avance del 0,7% (frente al 3,1% del periodo previo), a partir de las nuevas medidas de restricciones por el rebrote de Ómicron.
Ahora, con el nuevo año, y pese a la desescalada del coronavirus, se suma como nueva problemática el impacto de la guerra entre Ucrania y Rusia, la cual generó un fuerte repunte de los precios de la energía y complicaciones en las cadenas de suministro, según la agencia Bloomberg.
La ralentización y la inflación, que en marzo fue del 5,1% anual (un fuerte repunte frente al 1,11% del mismo mes del año anterior), representan una complicación para los planes de Emmanuel Macron de lograr la reelección, tras una victoria ajustada en la primera vuelta de los comicios contra la ultra-derechista Marine Le Pen de 27,84% contra 23,15%.
Para enfrentar a la inflación, uno de los puntos cuestionados por Le Pen, la administración de Macron destinó US$ 27.900 millones para ponerle techo a los precios de la energía y el gas natural asistiendo a las empresas en dificultades por las elevadas facturas, además de un subsidio de 15 centavos por litro en los combustibles.
“Después de una fuerte recuperación luego de la Covid, hay menores certezas hoy”, afirmó hoy el gobernador del Banco De Francia, Francois Villeroy de Galhau en una entrevista a un conjunto de diarios regionales.
Si bien para el funcionario “el crecimiento de Francia parece resistir mejor que sus países vecinos”, resulta “inevitable” que el país “atravesará tiempos económicos más difíciles”.
La estimación de la entidad monetaria, realizada en base a una encuesta nacional a cerca de 8.000 empresas, devela que, si bien la actividad de los servicios registró un avance en marzo, la construcción se mantuvo sin mayores cambios y la industria retrocedió, especialmente por las dificultades en la logística.
Con información de Télam
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