El Frente de Todos busca adhesiones a la propuesta para pagarle al Fondo con un fondo que consista de lo fugado por los evasores. Las mismas PYMES que sufrieron la bicicleta financiera y el ajuste del mercado con el macrismo ya se reunieron para apoyar la iniciativa que permita eliminar la tutela del FMI. Del otro lado, las grandes corporaciones y el poder económico que rechazan lo que consideran un “blanqueo encubierto”.
El proyecto, que cuenta con sanción del Senado, prevé que se abone por los activos no declarados en el exterior a partir de los US$ 500.000. Los alcanzados por esta norma deberán realizar un aporte del 20% de sus bienes evadidos que, como deberá ser en dólares, reforzará las reservas. La última estimación del Indec precisa que los argentinos guardan más de US$ 360.000 millones en el exterior. La mayor parte de ese monto no se encuentra formalizada ante el fisco.
En el caso de no oficializar los bienes dentro de los seis primeros meses de la entrada en vigencia de la ley, la alícuota subirá al 35%. La iniciativa introduce la figura del “colaborador”, que será “cualquier individuo, sea persona humana o jurídica, residente en el país o en el extranjero, que actuando en forma personal o conjuntamente, proporcione información relacionada con una violación de las leyes impositivas y de lavado de activos”.
Un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) proyectó que se podrían repatriar US$ 10.000 millones anuales si el FMI colabora en el proceso de regresar el dinero fugado. De hecho, se encuentra dentro de las obligaciones estatutarias del Fondo asistir a las naciones socias que le requieran recuperar dinero de sus préstamos desviado a guaridas fiscales. Esto se debe a que tanto Mauricio Macri como la cúpula del organismo internacional violaron la prohibición de utilizar el crédito para alimentar la insaciable fuga de capitales que tuvo el país entre 2018 y 2019.
Diputados y senadores del FDT, encabezados por los presidentes de los bloques, Germán Martínez y José Mayans, reunieron a casi 200 empresarios PYMES el miércoles en el Congreso. La mesa de legisladores y legisladoras contó con una amplia participación de representantes de las dos cámaras. En tanto, los empresarios asistieron nucleados en 28 cámaras del sector, como el Frente Productivo Nacional, APyme, PymeSur, Mesa de Unidad Pyme y Mujeres argentinas por el desarrollo, entre otros.
Según Oscar Parrilli, uno de los autores de la iniciativa, el encuentro significó "un importantísimo aval del empresariado verdaderamente nacional, el que da empleo y mueve la economía de los argentinos y argentinas, al proyecto que nos permita recaudar los dólares que necesita el país para pagar la infame deuda contraída por Macri con el FMI". En su intervención, Mayans describió la gravedad de la situación. Recordó que "el PBI argentino se redujo en US$ 200.000 millones durante el gobierno de Macri, a lo que hay que sumarle el endeudamiento por más de US$ 100.000 millones. Si tenemos un superávit de US$ 14.000 millones por año, ¿cómo hace un país para remontar semejante condena?".
A su turno, Germán Martínez comprometió el trabajo de todo su bloque para garantizar "el más pronto tratamiento del proyecto en la Cámara baja, para que por fin se convierta en ley". El concepto que dejaron claro los empresarios PYMES consistió en que la deuda con el Fondo limita las posibilidades de crecimiento y de desarrollo del país y del mercado interno, para el que produce la mayoría, así como las de créditos de las propias compañías.
Incluso el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, había aclarado a comienzos de año que “apoya completamente el espíritu” del proyecto. "Endeudamiento inédito, fuga inédita”, había caracterizado a los US$ 86.000 millones que salieron del país durante el macrismo.
Sin embargo, Sergio Massa dilató su tratamiento en el recinto cuando presidía la Cámara baja por no contar con los votos necesarios para darle un tratamiento expeditivo. Será responsabilidad compartida de conseguir los avales de Martínez y Cecilia Moreau, quien ahora ocupa la máxima autoridad de Diputados.
En su momento, Juntos por el Cambio rechazó de plano la propuesta. Mediante un comunicado, alegaron que “esta iniciativa que impulsa el oficialismo es un blanqueo encubierto disfrazado de populismo”. “Si están dispuestos a transitar un camino serio y responsable, basado en el respeto y el diálogo permanente con todos los sectores, allí estaremos para acompañar”, habían opinado.
MÁS INFO
Quién controla al FMI
“El poder del FMI radica en que discrecionalmente puede rechazar solicitudes de crédito, exigir políticas antipopulares sin asumir responsabilidad, desconocer la legitimidad de un Gobierno y, en cambio, prestarle dinero a un Gobierno de facto”, atinó CELAG en describir a la entidad multilateral que le dio el mayor préstamo de su historia desde la segunda postguerra a Mauricio Macri para la campaña presidencial 2019. Es que al organismo le basta con realizar declaraciones, informes, proyecciones económicas negativos para desatar tormentas especulativas en los mercados.
“¿Quién maneja ese poder?”, se preguntaron Guillermo Oglietti y Lisandro Vergara en otro reporte. Estados Unidos tiene votos para impedir cualquier cambio relevante, y con unos pocos aliados puede aprobar lo que desee. “No hay pluralidad de pensamiento económico. No existe representación relevante de funcionarios provenientes de los países asiáticos de desarrollo reciente, que son quienes más podrían aportar para contribuir al desarrollo latinoamericano”, resaltaron. Es por esto que el poder del Fondo no refleja la estructura multipolar actual.
Puertas adentro, entre los directores gerentes europeos de las tres últimas décadas, CELAG encontró un 60% con faltas de ética probadas. Entre los subdirectores gerentes primeros de origen estadounidense, 25% registró faltas de ética.
El relevamiento del centro que dirige Alfredo Serrano Mancilla concluyó que un tercio de los 404 créditos que otorgó el Fondo en su historia se los entregó a gobiernos de facto. En total, apenas un 10% de los acuerdos y casi un 3% de los fondos fueron concedidos a mandatarios latinoamericanos soberanistas.
“Sorprende este diseño permisivo con su staff porque contrasta con las exigencias de buena gobernanza y anticorrupción que el Fondo les hace a los países que supervisa”, resaltó. Sorprende también que tanto poder no tenga más control.
MÁS INFO
Primera prueba de Massa con el mercado
El Ministerio de Economía consiguió una adhesión del 85% para el primer canje de letras de la administración de Sergio Massa. Tanto el porcentaje como el monto que se prorrogó su vencimiento resultaron considerables: cerca de $ 2 billones que vencían en los próximos tres meses.
Massa superó así su primera prueba con la plaza financiera, luego de que haya anunciado que reducirá el déficit y que sólo lo financiará con mayor recaudación y endeudamiento en moneda local. Fuentes de la city porteña deslizaron a El Destape que, si bien 50 puntos de ese 85% están compuestos por organismos estatales, la totalidad de los privados con bonos elegibles aceptaron voluntariamente el roll-over, a excepción de un fondo extranjero. El resto de los que componen el 15% que no se sumó consisten en administradores de liquidez, fondos de corto plazo.
Pese a este aval del mercado, el 7,4% de inflación que marcó el Indec para julio dejó en claro que la puja de precios de las grandes corporaciones deberá ser la prioridad en la agenda tanto del ministro como de todo su equipo, principalmente de Matías Tombolini, el secretario de Comercio Unificado. El economista admitió que el último dato resultó el más alto en dos décadas. Al mismo tiempo, reiteró que agosto también será un mes “difícil en materia de precios”.