(Por Mara Laudonia, enviada especial a Washington).- El ministro de Economía, Sergio Massa, afirmó hoy que el crédito tomado por el expresidente Mauricio Macri en 2018 con el Fondo Monetario Internacional (FMI) "desgraciadamente representa una hipoteca" para el país, con la cual "hay convivir hasta que se tenga capacidad de cancelar esa deuda".
En una rueda de prensa brindada en Washington, Massa informó formalmente sobre la finalización de la quinta y sexta revisión del programa con el FMI que implicó un desembolso de US$ 7.500 millones por parte del organismo, lo que permitió la cancelación de los financiamientos recibidos de la CAF, Qatar y China para cubrir los vencimientos.
Tras calificar como "una hipoteca" al crédito tomado en 2018 por US$ 44.500 millones, Massa dijo que con esa plata el expresidente Mauricio Macri financió la "fuga de capitales".
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"Nos dejó un ancla o cepo enorme", que debió afrontar la actual gestión y "tenemos la responsabilidad de resolverlo", señaló Massa en una rueda de prensa.
Sobre el alcance de la revisión del programa aprobado hoy, el ministro afirmó que una parte del desembolso de US$ 7.500 millones que el FMI realizó a la Argentina podrán usarse para "la intervención en los dólares financieros".
Massa precisó que esa intervención se hará a través de un "programa de bandas" que solo conocen el FMI y el equipo económico argentino para "garantizar el normal funcionamiento" del mercado de dólares bursátiles y evitar ataques especulativos sobre la moneda.
"Esto nos permite transmitir una situación de control de una de las variables que aparece como de intranquilidad, que es el funcionamiento de los dólares financieros", aseguró el titular del Palacio de Hacienda tras una jornada que incluyó una reunión con la titular del organismo, Kristalina Georgieva, y otros funcionarios del Staff del FMI.
En el mismo sentido, Massa aseguró que el desembolso del Fondo que esta misma tarde impactó en las reservas del Banco Central "multiplica por cinco" la capacidad de intervención en el mercado cambiario que el Gobierno venía teniendo.
"Otorga más fortaleza en el día a día para, eventualmente, frente a ataques especulativos, desde el Banco Central responder con firmeza", aseguró.
Tras reiterar que la devaluación superior al 20% que decidió la cartera económica tras las elecciones PASO fue una imposición del FMI, Massa dijo que para morigerar el impacto "desde el viernes se estarán tomando todas las medidas que van a permitir que ese sufrimiento y frustración de muchos argentinos se vea compensada".
Massa adelantó que esas decisiones a tomar tienen que ver con "recuperar poder de compra en salarios y jubilaciones, aumentar la competitividad por mejoras impositivas para las pymes y sostener los niveles de importaciones mediante programas de mejoramiento a anunciar en 48 horas".
En otro tramo de su exposición, el ministro también destacó el trabajo del equipo técnico del Palacio de Hacienda en las negociaciones llevadas adelante con el FMI:
"Es muy fácil venir a discutir al almacén con el manual del almacenero y aceptar cada una de las condiciones que se ponen, en lugar de defender el interés de la Argentina y no simplemente cumplir con la formalidad de quedar bien con los funcionarios del Fondo Monetario", dijo el ministro.
Por último, Massa sostuvo que la voluntad del Gobierno es "mantener una relación seria, sana con el FMI, pero no aceptar imposiciones que lastimen y dañen la realidad de los argentinos".
"El país viene de frustración en frustración y debe recorrer un camino de recuperación de la autonomía con sus exportaciones y vender su trabajo al mundo para lograr una balanza superavitaria que haga fuerte a la moneda. Es el único camino posible para ser un país soberano", sentenció.
Con información de Télam
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