Las perspectivas económicas para el resto del año no mejoran. Las principales consultoras del mercado estiman que la caída del PBI será del 3,7%. Así quedó registrado en el último informe del Banco Central conocido como Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM). El sector privado no modificó su visión en relación al REM anterior. En el caso del saldo comercial, las consultoras pronostican que habrá un menor ingreso de dólares, situación que complica todos los planes del Gobierno que sigue rastreando su inalcanzable lluvia de inversiones.
La merma en la cantidad de divisas del comercio exterior se explicaría por la fuerte baja de los precios internacionales. Según el Indec, el índice de precios de las exportaciones descendió 7,4% durante el segundo trimestre del año comparado con el mismo período de 2023.
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Los principales descensos ocurrieron en las principales materias primas comercializadas por el país, como son el trigo, maíz y la soja. El precio internacional de la carne también registró una caída del 10%. Durante el primer semestre del año, el consumo tuvo una merma del 18% mientras que las ventas al exterior avanzaron un 12%. Con la baja de las retenciones para las exportaciones de carne, empeorarán los registros del mercado interno.
Precios a la baja
El Gobierno necesita dólares y nos los encuentra. El complejo agroexportador aportará lo suyo, pero con valores a la baja. Las principales consultoras del país estimaron para este año exportaciones totales por 77.194 millones de dólares, es decir, 900 millones menos que lo calculado en el REM de junio y 5600 millones menos de lo previsto al inicio del año.
La apuesta plena por las exportaciones choca con el escenario internacional y los precios de los commodities que vienen a la baja. En el segundo trimestre de 2024, hubo un descenso del 7,4% respecto al mismo período del año anterior, por lo que marcó el sexto registro trimestral de sucesivas caídas interanuales. En el semestre, la baja de los precios fue del 7,7%. En el caso de los productos primarios, el descenso de precios fue del 13,8%, mientras que en el caso de las manufacturas de origen agroindustrial, hubo una merma del 13,4%.
“Los precios de los productos primarios cayeron como consecuencia de la merma en los subrubros cereales (-23,7%) y semillas y frutos oleaginosos (-13,5%), que tienen una notable ponderación en el índice”, puede leerse el último informe del Indec sobre los datos del comercio exterior.
Los descensos en el valor de los principales productos exportados por el país se vienen repitiendo desde hace meses. En el caso del trigo, la variación negativa durante el período marzo – junio fue del 21,5%, seguido por el maíz (-26,2%), sorgo (-18,5%) y la cebada (-26,2%). En el caso del precio del poroto de soja, el descenso fue del 19,8%. “En las variaciones de precios de los productos que conforman las MOA se destacaron harina y pellets de la extracción de aceite de soja (-19,1%), aceite de soja en bruto, incluso desgomado (-16,6%), carne bovina deshuesada, congelada (-10,3%), aceite de girasol en bruto (-19,0%), vino de uva (-1,2%), leches preparadas (-9,4%) y quesos (-4,1%)”, analizaron desde el Indec.
De carne éramos
Desde el Poder Ejecutivo apuestan a las exportaciones de carne y a una reducción cada vez más marcada del consumo interno vía deterioro de los ingresos de la población. Durante junio, el consumo cayó un 30%, mientras que en el acumulado del año la merma sería del 18%. “En el primer semestre del año se exportaron unas 454.712 toneladas de las 1,5 millones producidas, de modo tal que la exportación representó el 30,5% del destino de nuestra producción. Estos volúmenes sólo pueden explicarse por la histórica caída del consumo interno ya que la faena y la producción de carne cayeron significativamente en el mismo período”, explicó José María “Cacho” Romero, ex subsecretario de carnes durante el Gobierno del FdT.
La faena del mes de junio resultó un 22% menor en relación al mismo mes del año pasado y la producción de carne vacuna cayó también un 21% en la misma comparación. En el acumulado del semestre la faena fue de 6.555.693 cabezas con una disminución de 774.336 cabezas menos que en el mismo periodo del año 2023.
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El menor consumo de carne, en un escenario donde también disminuyó la producción, fueron los dos catalizadores de las exportaciones. A pesar del avance del 12% en los volúmenes importados, el ingreso de divisas fue mucho menor -0,1% más que en el mismo período del año pasado-, como consecuencia de una baja en los precios internacionales en el orden del 10%.
La eliminación de las retenciones para una serie de cortes exportables profundizará aún más el deterioro del mercado interno, ya golpeado por la licuación de los recursos de la población. “Analizando el consumo promedio móvil del primer semestre del año podemos afirmar que, de continuar esta tendencia, el consumo de carne por habitante por año cerrará este 2024 con apenas 44,5 kilos, el resultado más bajo de nuestra historia”, concluyó Romero.
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