Leo Bilanski: "El Gobierno tiene el enorme desafío de desmonopolizar la economía"

El titular de  la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) habló con El Destape y aseguró que el Estado debe intervenir para retrotraer entre 3 y 10 puntos la participación en el mercado interno de las grandes empresas nacionales y extranjeras.

15 de julio, 2021 | 20.23

“En este 9 de Julio, queremos manifestar la imperiosa necesidad de independizarnos económicamente de las corporaciones para alcanzar una verdadera soberanía”. Así fue el comunicado que la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC), organización que nuclea a 300 pequeñas y medianas empresas de 20 provincias, difundió por el día de la independencia, bajo el precepto que los grupos económicos impiden el desarrollo del país. Según su titular, Leo Bilanski, las pequeñas y medianas empresas representan el 99,4 por ciento de las unidades productivas y emplean al 65 por ciento del empleo privado, pero solo el 0,6 por ciento de las empresas, las grandes, mantienen la centralidad de la política económica nacional.

“El gobierno tiene el enorme desafío de desmonopolizar la economía argentina", sostiene Bilanski ante El Destape, lo que concretamente significa que el Estado debe intervenir para retrotraer entre 3 y 10 puntos la participación en el mercado interno de las grandes empresas nacionales y extranjeras. Eso crearía nuevos espacios de venta y nuevas pymes, así como nuevas fuentes de trabajo privado formal, sin que se pierdan los empleos de las multinacionales, ya que su nivel de productividad está más vinculado a la tecnología que a la mano de obra.

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- ¿En términos generales, como evalúan la respuesta del gobierno frente a la problemática pyme?

- Vemos que el año pasado se prestó más atención. Actualmente, pareciera haber cierta dificultad de control, o de influencia, en lo que respecta a ordenar los costos de insumos producidos por las empresas monopólicas, sobre todo de materias primas, que resintieron fuertemente el margen de ganancias de las pymes, obligándolas a rever toda la estructura de costos. Por eso, los empresarios encuestados por nuestra asociación prevén una inflación anual de entre el 40 y 50 por ciento. El ministro Guzman planteó reducir la inflación en 5 puntos por año durante el actual gobierno, pero este año se espera una inflación 5 puntos superior, es decir una brecha del 10 por ciento, y eso impacta directo en nuestros clientes, que son los trabajadores. Si a ellos se suma a los trabajadores de la economía popular, estamos viendo que un 75 por ciento de los trabajadores no van a recibir paritarias superiores al 40 por ciento, que solo pueden pagar las grandes empresas y el Estado, con lo que se resentirá aún más el mercado interno.

- Hacía referencia a la necesidad de “desmonopolizar” la economía ¿La “Ley de Góndolas”, que obligaba a los supermercados a exhibir productos de pymes es un ejemplo de estas acciones?

- La Ley si, pero lamentablemente se reglamentó en sintonía con las demandas de las grandes empresas, y de hecho la reglamentación no respetó el espíritu de la ley. De la misma forma, si bien existe el crédito público, los mismos solo se destinan a estas empresas, es decir las Clase A, que ya pueden acceder al crédito privado, pero nosotros necesitamos créditos respaldados por nómina de trabajadores empleados, sin los requisitos que piden los bancos.  

- ¿Son recibidos estos reclamos por parte de los actuales funcionarios?

- Si, y hay buena predisposición del Ministerio de Desarrollo Productivo, pero también es cierto que la velocidad no se condice con las necesidades de nuestro sector. Además, el gobierno debería fortalecer el dialogo con los sectores de empresas nacionales para alinear las políticas con un colectivo más grande de pymes, que hoy no acceden a las ayudas del Estado. De hecho, creemos que para que los resultados cambien, hay que cambiar los actores con los que el gobierno suele dialogar.  

- Justamente se cumple un año del acto que encabezó Alberto Fernández, el cual fue criticado por convocar solo a la UIA y la SRA…

- Es un factor común denominador del gobierno que las pymes no estemos en la discusión de la política económica de fondo. En el Consejo Económico y Social, por ejemplo, de los diez espacios para el mundo empresario, solo uno es ocupado por Pymes. A diferencia del macrismo, hoy sí somos convocados para reuniones de trabajo o informativas, pero en la definición de políticas públicas, no estamos. La realidad es que hoy nos ubican en un lugar periférico, porque este gobierno no quiere chocar con los bancos y las multinacionales, por caso hoy día los créditos pymes son subsidiados al banco, no a las pymes. Es una deuda pendiente del gobierno de Alberto Fernández transformar el sistema financiero para orientarlo a la producción y no a la especulación.   

- Desde el gobierno plantean también una dificultad para encontrar un interlocutor entre la gran cantidad de organizaciones gremiales Pymes. ¿Cree que el gobierno debería tomar acciones para unificar la representación?

- Por supuesto, facilitar ese proceso es su obligación política, pero el gobierno no hace política sobre el mundo empresarial. Y un proyecto nacional y popular no es sustentable sin un empresariado pyme empoderado como actor político y apoyo empresarial, pensarlo de otra forma, es como pensar un feminismo sin mujeres.