El gobierno de Javier Milei confirmó la renuncia de Eduardo Rodríguez Chirillo a la Secretaría de Energía luego de las versiones cruzadas en torno a posibles cortes de luz durante el verano. Su reemplazo en el cargo será María Tettamanti, quien hasta hoy se desempañaba como gerenta general en NRG Energía S.A.
La empresaria cercana al expresidente Mauricio Macri tomará las riendas de la secretaría y tendrá la responsabilidad de avanzar en aumentos de tarifas, la recategorización de los subsidios y la licitación de obras de infraestructura esenciales para el desarrollo del yacimiento de hidrocarburos no convencionales Vaca Muerta.
Las justificaciones del Gobierno por la salida de Rodríguez Chirillo
"Este jueves, el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, presentó su renuncia por motivos personales y continuará colaborando con el Ministerio de Economía en diferentes proyectos. En este sentido, el ministro de Economía, Luis Caputo, agradeció el enorme trabajo y el sacrificio personal realizado por Eduardo durante su gestión para cumplir con su tarea comprometido con la Patria al frente de la Secretaría de Energía", señaló el comunicado oficial.
Tettamanti posee una trayectoria de más 30 años en la industria de energía en la Argentina. María "ha trabajado en distintas empresas del sector, incluyendo posiciones al máximo nivel ejecutivo y ha sido una persona de consulta del Secretario de Coordinación de Energía y Minería, Daniel González", cerró el comunicado.
A través de las redes sociales, Caputo afirmó que Chirillo le dijo que "dado los problemas que ha tenido de salud, y que si bien ahora se encuentra mucho mejor, va a necesitar más tiempo para sí mismo". Junto con Daniel González le pidieron que se quedara como asesor, para "poder seguir contando con su colaboración", sostuvo.
"Eduardo ha sido un pilar fundamental en estos primeros meses de gobierno, no solo por su enorme aporte en todo lo referido a Energía, sino también por la elaboración de la Ley Bases. El sacrificio personal que ha hecho todos estos meses, y del que he sido testigo, es todo un ejemplo de patriotismo que eleva aún más sus condiciones humanas y profesionales. Mi agradecimiento personal y mi reconocimiento profesional para con su persona es enorme", concluyó Caputo.
Luego de un 600% de aumento en los últimos nueve meses, una fuerte recesión y una caída interanual de la capacidad instalada del sector industrial, Rodríguez Chirillo había advertido que los cortes de luz programados anunciados por el Gobierno iban a afectar a las "industrias" y con el objetivo de "alivianar la red".
De esta forma, había desestimado que los cortes de luz fueran "residenciales", en un intento por desmentir lo planteado por el propio jefe de Gabinete, Guillermo Francos. "En lo que es cortes programados, se trata de industrias. En ningún momento se está hablando de residenciales", había explicado.
Chirillo había defendido la medida de cortes a las industrias al asegurar que la gestión de Milei asumió con "un sistema al borde del colapso" tanto "recaudatorio" como de "funcionamiento" y ponderó la recomposición de las tarifas.
Casi 1,4 millones de hogares están a punto de perder los subsidios
Un total de 1,4 millones de hogares perderán los subsidios a la electricidad y el gas, ya que no completaron el registro para seguir recibiéndolos, a pesar de que tienen el beneficio de la tarifa social. Estos usuarios no ingresaron los datos en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE).
Por ahora, el Gobierno analiza lanzar una nueva campaña de información para que lo hagan, pero los beneficios los perderían a partir de diciembre. Según Energy Report, de los 1,7 millones de familias que debían realizar el trámite del RASE, solo lo hicieron 300.000, apenas el 18% del total. Según corroboró este medio con fuentes oficiales, las cifras son ciertas.
La posibilidad de ingresar los datos al RASE se abrió en junio por 60 días y en agosto se extendió por otros 30 días hasta el 4 de septiembre. Desde entonces, la Secretaría de Energía analiza los pedidos que se hicieron.
La gestión de Alberto Fernández puso en marcha en 2022 la segmentación tarifaria por la que todos los usuarios debían anotarse en el RASE o perderían el subsidio. Allí se dividió a los hogares en altos ingresos (Nivel 1 que no recibe subsidio), Ingresos bajos (Nivel 2) e Ingresos Medios (Nivel 3).
Los últimos datos oficiales arrojan que los N1 son 5 millones, los N2 son 8,3 millones y los N3 son 2,8 millones. La Resolución 90/2024 de Energía contempla que quienes no cumplan con el trámite serán catalogados como N1 y, por tanto, perderán el subsidio a la electricidad. En el caso del gas, el ente regulador (Enargas) cuenta con mayor información porque la subvención se otorga a nivel nacional, por lo que el Gobierno cuenta con más herramientas para "depurarlo".