El apoyo oficial para sostener el empleo durante la pandemia en la Argentina fue el más importante en todo el mundo, según un estudio global de UNI Global Union y la Confederación Sindical Internacional (CSI). La entidad con sede en Nyon, Suiza, representa a más de 20 millones de trabajadores de más de 150 países diferentes en los sectores de servicios. El estudio incluyó 124 países, 37 estados de EEUU, 13 provincias y territorios canadienses y siete estados australianos.
El arribo de la pandemia generó que el 98 por ciento de los trabajadores del mundo no reciba paga por enfermedad, además del reemplazo de salario y los beneficios sociales que necesitan para soportar los impactos del COVID-19. El primer análisis global del apoyo de COVID-19 a los trabajadores clasifica las respuestas gubernamentales a la pandemia y encuentra a la Argentina a la cabeza del ranking por su respuesta. "Poco más de la mitad de los gobiernos en estudio reconocen al COVID-19 como una enfermedad ocupacional a través de un proceso regulatorio formal. Los cinco primeros países en el ranking del informe fueron Argentina, Austria, Suecia, Francia y España", detalla el documento.
El estudio incluyó 124 países, 37 estados de EEUU, 13 provincias y territorios canadienses y siete estados australianos. "La pandemia de coronavirus ha afectado de manera desproporcionada a mujeres, personas de color, migrantes, personas precarias, trabajadores y otros grupos vulnerables, que tienen más probabilidades de trabajar en empleo subvalorados y mal pagados en la primera línea de la pandemia de COVID-19", según el documento.
Solo diez jurisdicciones (5,5 por ciento recibieron las calificaciones más altas que indican disposiciones buenas o muy buenas para reemplazo de salario, tratamiento médico, pago por enfermedad y beneficios por muerte. "Las diez jurisdicciones mejor calificadas en el estudio, que incluyeron Argentina, Massachusetts, New Hampshire y Nueva Jersey, brindan el mejor apoyo para los trabajadores afectados por COVID-19", agrega el estudio. Sin embargo, estas jurisdicciones representan solo el 2 por ciento de la población activa mundial, lo que deja a la gran mayoría de la población trabajadora con provisiones y beneficios limitados si se ven afectados por el virus.
"Argentina recibió el puntaje más alto de un país, lo que demuestra que un fuerte apoyo a los trabajadores no depende de la riqueza de una Nación", destaca el informe de las organizaciones.
La paga por enfermedad estaba disponible en 104 jurisdicciones, lo que significa que casi el 43 por ciento de los trabajadores no tenía acceso a licencia por enfermedad remunerada. Solo el 6 por ciento de las jurisdicciones estudiadas tenían presuntas reglas, regulaciones, leyes o políticas que otorgan acceso automático sin prueba al tratamiento médico y reemplazo salarial para todos los trabajadores. Sin embargo, al considerar a los trabajadores de la salud este porcentaje se elevó al 17 por ciento.
En Alemania y los países nórdicos, la legislación existente sobre enfermedades infecciosas significa que los trabajadores que contratan COVID-19 tienen acceso automático a licencia por enfermedad, reemplazo de salario y atención médica. No se necesitaba ningún cambio formal en la legislación para apoyar a los trabajadores. Proporcionan algunos de los mejores ejemplos de cómo un país podría prepararse para futuras pandemias.
Desde UNI Global Union y la CSI recomiendan avanzar en la calificación automática para beneficios relacionados con la enfermedad COVID-19, una mayor cobertura para todos los trabajadores independientemente de la relación laboral, la inclusión de una categoría general de enfermedades infecciosas ocupacionales en las leyes y políticas y la Licencia por enfermedad pagada para pruebas y recuperación.