Las propuestas de gobierno presentadas por el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, en estas elecciones 2023 pusieron en alerta a no pocos sectores de la actividad tal es el caso de pymes, economías regionales, sector del turismo, salud y educación, entre otros, que visualizan serias dificultades para desarrollarse en una economía dolarizada, con apertura indiscriminada, privatización de servicios y sin acompañamiento estatal, según propone el libertario. En ese esquema, el sector cooperativo manifestó también su preocupación y alertó que una política económica que atente contra el movimiento cooperativo “sería catastrófica” por su impacto en los más de 350 mil puestos de trabajo que genera el sector.
La lógica productiva del “modelo de la libertad” que promueve La Libertad Avanza anula toda intervención estatal al punto de que se espera que una empresa pyme o cooperativa comercie directamente con un Estado, por su propia cuenta. Frente a esta posibilidad, el sector que abarca a más de 20 mil cooperativas en el país recordó que su actividad tiene un impacto directo en el crecimiento económico y las oportunidades de trabajo de las economías locales con presencia en diferentes sectores productivos, de servicios y del agro que quedarían en total desventaja ante la “competencia desleal externa” y la lógica del “sálvese quien pueda".
“El sector privado no busca hoy la generación de puestos de trabajo como una necesidad, sino que lo hace a fin de mantener su rentabilidad. En cambio las cooperativas lo hacemos por mantener el puesto de trabajo, por mejorar el barrio y la ciudad donde funcionamos. Somos generadores de empleo por naturaleza, por eso un sistema conservador abierto a las importaciones atentaría contra la industria nacional y la producción local. Las cooperativas de trabajo vendemos el 90% de lo que producimos dentro del país”, señaló en diálogo con El Destape, Cristian Horton, presidente de la Federación de Cooperativas de Trabajo de la República Argentina (Fecootra).
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Sobre el rol del Estado, evaluó que “la ausencia de la política pública va a beneficiar a los que más tienen” y agregó: “No podemos apoyar de ninguna manera una propuesta que además reivindica aspectos de una dictadura genocida, cuyas consecuencias económicas del plan de desindustrialización estamos pagando todavía ahora”.
Características del sector
En Argentina existen unas 25.000 cooperativas y 5.000 mutuales, que generan más de 350 mil puestos de trabajo en tanto que al menos 27 millones de personas están vinculadas, directa e indirectamente, a estas formas de organización del trabajo, de prestación de servicios, de ayuda social y económica cuya producción explica cerca del 10% del PBI del país, según datos oficiales y sectoriales.
En nuestro país este sector participa en diferentes ramas. “El cooperativismo de trabajo es el 80% de total de las cooperativas del país, y además en estos últimos años fueron creciendo en la actividad agropecuaria, de alimentos, financiera. En trabajo hay sectores que se desarrollaron mucho como la construcción acompañada por políticas de Estado, sumado a que la economía popular que ha dado un paso en la formalización de sectores de trabajo no registrado, también creció exponencialmente el sector de gestión de residuos y la economía del cuidado de personas, a esto hay que sumar la economía que vende conocimiento, las cooperativas de tecnología, que también crecieron mucho este tiempo”, detalló Horton, quien es también tesorero de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar).
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Esta forma de organización del trabajo, de la producción y de los servicios resalta los valores de solidaridad, trabajo, productividad y cuidado del ambiente. "Somos entidades sin fines de lucro y nuestros excedentes están destinados a satisfacer las necesidades de asociados y de la comunidad", señalaron en un comunicado desde dicha representación gremial. Sobre ello, el entrevistado apuntó a este portal que “el rol del cooperativismo es fundamental porque está muy arraigado en comunidades del interior que es donde menos oportunidades hay, donde se aporta más al desarrollo local y están más presentes las necesidades de la comunidad, y donde las muchas empresas de lucro no llegan porque no tienen la rentabilidad que pretenden, por eso ahí está el cooperativismo dando respuestas”.
En ese sentido, las cooperativas suministran electricidad en gran parte del territorio nacional, fueron pioneras en telefonía rural y hoy garantizan accesibilidad de internet, cable por TV y telefonía celular, además construyen viviendas y barrios completos, impulsan el acceso a créditos, administran escuelas, radios, canales de televisión, cuentan con experiencia en producción de software, brindan servicios de salud y a pymes de todo el país.
Rol del Estado
Pese a que desde algunos sectores de la actual oposición política se repite que la intervención del Estado es “poco eficiente” y representa un mero problema para el libre accionar del mercado, lo cierto es que juega un rol importante en el apoyo económico y el impulso comercial al sector cooperativo del país.
Según datos del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes) en los últimos tres años 795 proyectos productivos y de servicios públicos recibieron financiamiento por un monto total de $9.596 millones, a partir de créditos con tasas subsidiadas y con beneficios para el sector cooperativo y mutual, con destino a mejoras en la productividad, con nuevo equipamiento y tecnología y el fortalecimiento de las empresas en marcha. De acuerdo al organismo, se priorizaron proyectos que conllevan la generación de nuevos puestos de trabajo, que intervienen en la producción y venta de productos alimenticios y de la canasta familiar, y que incluyen perspectiva de género pata acortar las desigualdades existentes.
Por su parte, en materia de comercio exterior el impulso estatal fue clave para que este sector aumentara su participación en las ventas. En la primera mitad del año las cooperativas del país exportaron unos 120 productos al mundo (se registraron envíos a 88 destinos globales, entre los que se destacan China, Vietnam, India, Malasia y Perú), lo que les permitió alcanzar los 965 millones de dólares por exportación, mejorando la participación en el total de ventas, que se ubicó en torno al 3%, de acuerdo con el último informe realizado por el Monitor de Exportaciones del Cooperativismo. El 2022 ya había marcado una mayor injerencia anual del sector sobre el total de las ventas argentinas al mundo (creció al 4,4% el año pasado), con la exportación de 160 productos a 121 destinos diferentes. En los últimos cinco años el sector aumentó sus exportaciones un 167%.
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Desde el INAES entienden que un punto clave se vincula con la puesta en marcha de misiones para fomentar exportaciones, participación en ferias internacionales, y contactos con actores globales para lograr la apertura de circuitos comerciales. Lo anterior no solo repercute -como todo sector que exporta- en un mayor ingreso de divisas al país sino que además incide, de forma más directa, en el desarrollo de cada región del país. “Frente a tanto avance del individualismo y de la idea de que cada uno se salva solo, la mejor contracara es mostrar el asociativismo que representa en el interior de la Argentina el arraigo de la producción, el cooperativismo y el mutualismo. No solo es el abastecimiento del mercado interno sino la generación de valor agregado, la exportación de trabajo argentino al mundo, la apertura de mercados y sobre todas las cosas en un tiempo como el que viene, en el que fortalecer nuestras reservas es fortalecer nuestra moneda, garantizar la derrota de la inflación y es mejorar el sistema de crédito", señaló por su parte el actual ministro de Economía y candidato presidencial de Unión Por la Patria, Sergio Massa, en su visita a cooperativas agroindustriales la primera semana de noviembre en Córdoba.
En relación, desmintió también que en un eventual gobierno apunte a aumentar los impuestos de este sector, luego de que circulara un comunicado de la Mesa de Enlace que -como contó este medio- planteaba que como consecuencia de la discusión en el Congreso de la separata de beneficios tributarios que favorecen hoy a distintas empresas, se vendría un “impuestazo fiscal para productores". Sobre esto el candidato de UP dijo, "no voy a permitir que se destruya el sistema cooperativo y mutual cobrándole impuestos que nada tiene que ver con la historia y diseño de ese sistema".
A quién beneficia el “modelo de la libertad”
“El emprendedor es un héroe” dijo este miércoles el candidato libertario, Javier Milei, en el marco del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP) que reúne a los grandes grupos empresarios del país. En el mismo encuentro llamó a los asistentes a que “despierten” y “no se dejen robar, no dejen que le maltraten el derecho de propiedad”, en relación al sistema impositivo del país, a la vez que también aprovechó la ocasión para reafirmar su posicionamiento sobre el rol del Estado y el comercio, “los empresarios que hagan lo que quieran pero yo no puedo ser aliados de comunistas” sumó en referencia a China y Brasil.
Como en el último debate de cara al balotaje, el candidato Milei volvió a sostener que el comercio debe quedar librado a las propias reglas del mercado, lo que implicaría que si una pyme o cooperativa quieren vender al exterior deberían negociar por su cuenta con un Estado, una cámara empresaria internacional y con la propia Organización Mundial de Comercio. Sobre esto, Horton indicó: “Las cooperativas somos generadores de empleo por naturaleza por eso un sistema abierto a las importaciones, que incentive que el mercado nos invada de productos, atentaría contra la industria nacional y la producción local, donde vendemos el 90% de lo que producimos. La competencia sería muy desleal en ese sentido”. Y ejemplificó: “las empresas recuperadas son una muestra de generación y contención de empleo cuando, en otro momento, esa fábrica estaría cerrada. Entonces para nosotros una política económica que no favorezca el desarrollo del movimiento cooperativo, de la economía social, sería realmente catastrófico”.
En el mismo sentido, en septiembre pasado desde el INAES viajaron junto con representantes del sector a China -principal destino de sus ventas al exterior- para la “primera misión de cooperación chino-argentina” que buscó incentivar la promoción del comercio con el sector cooperativo y mutual. Según señaló públicamente su presidente, Alexandre Roig, el objetivo fue “garantizar el desarrollo del trabajo argentino en cada rincón del país, evitando la concentración y promoviendo la distribución de los beneficios exportadores”. Esto es algo que no solo ocurre en nuestro país, según la Alianza Cooperativa Internacional más del 12% de las población mundial es cooperativista de alguna de las 3 millones de cooperativas del globo que generan ingresos de aproximadamente 2,14 billones de dólares y representan el 10% de la población empleada, al mismo tiempo que suministran los servicios y las infraestructuras que la sociedad necesita.
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“El sector privado no busca hoy la generación de puestos de trabajo como una necesidad sino que lo hace a fin de mantener una tasa de rentabilidad, en cambio las cooperativas lo hacemos por mantener el puesto de trabajo, por mejorar el barrio y la localidad”, consideró el representante de la Confederación Cooperativa de la República Argentina y añadió que “la propuesta de Milei, de que cada uno lo resuelva solo, siempre va a beneficiar al que más tiene mientras que la ausencia del Estado perjudica al que menos tiene. No apoyamos de ninguna manera esta propuesta y menos cuando además reivindica aspectos de una dictadura genocida cuyas consecuencias económicas del plan de desindustrialización que inició la dictadura y que continuó en el menemismo y las privatizaciones, las estamos pagando todavía ahora”.
Finalmente, desde la representación cooperativa emitieron un comunicado en el que destacan la necesidad de avanzar en un futuro gobierno que escuche sus propuestas en “la conformación de una red de actores territoriales para desplegar un plan cooperativo para la soberanía alimentaria, enfocado en la producción y comercialización de alimentos, también en la promoción del cooperativismo de consumo como política de organización de los consumidores en la defensa del ingreso familiar y contra las prácticas monopólicas y a favor del consumo social y ambientalmente responsable, y con un programa nacional para el financiamiento proyectos cooperativos de vivienda”, entre otros.