Mientras el Gobierno se debate cómo salir de las presiones del mercado, el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, afirmó que es necesaria una "política de shock" que implique el uso de una moneda digital como "moneda de curso legal única" para resolver la "inestabilidad macroeconómica". Según el exjefe de gabinete, un nuevo modelo monetario terminaría con los problemas que genera la divisa estadounidense sobre el funcionamiento del país.
En las últimas semanas, la vicepresidenta Cristina Kirchner insiste sobre el planteo del bimonetarismo como el principal conflicto económico que fustiga a la Argentina. A raíz de esto, Capitanich dialogó con el programa de YouTube "El Método Rebord" y formuló un planteo novedoso que cambiaría las reglas monetarias tal cual las conocemos.
Cómo funcionaría la moneda digital que quiere implementar Capitanich
"Hay que tener un plan que resuelva los tres problema estructurales de la Argentina: restricción energética, externa y logística. Las tres se retroalimentan para tener inestabilidad macroeconómica de origen crónico. Hay que tener una política de shock y, para mí, debe ser la posibilidad de tener un modelo que implique aplicar la moneda digital como moneda de curso legal única", aseguró Capitanich. En ese sentido, se explayó: "Si querés hacer transacciones en dólares, si los tenés, lo podes hacer, pero tenés que poner en una cuenta fiduciaria en el Banco Central con 100% de encaje".
De acuerdo a las proyecciones del chaqueño, se estiman entre 130 y 250 mil millones de dólares "debajo del colchón" o fuera del circuito formal. Según el gobernador, con este instrumento "lográs que la evasión se reduzca drásticamente", habría una "mejora sustancial en la eficiencia del gasto público, solidez desde el punto de vista fiscal", y se resolverían "los problemas de inestabilidad macroeconómica".
Por último, el gobernador detalló por qué un nuevo sistema no traería inconvenientes a la dinámica diaria: "Tenes que dar trazabilidad con la moneda de curos digital, sería una obligatoriedad y a la vez eliminás la moneda papel". En ese sentido, remató: "Si querés hacer una transacción al exterior, y pretendés afectar una moneda extranjera depositada en el Banco Central, esto no provocaría un efecto negativo sobre el multiplicador bancario y tampoco afectaría el desenvolvimiento macroeconómico".
Capitanich pidió unidad política y un "plan antiinflacionario"
En diálogo con Radio10, el miembro de la Liga de los Gobernadores también destacó que en los próximos días va a ser necesario tener estabilidad cambiaria como "precondición para la estabilidad macroeconómica”. Y sumó: "Es imprescindible crear las condiciones para organizar la vida de la gente. La gente quiere vivir en paz, democracia, en libertad, que se respeten sus derechos que puedan tener un trabajo y salario digno”, indicó.
El ex jefe de gabinete opinó que la Argentina tiene una perspectiva favorable en el mediano y largo plazo pero eso se alcanzaría -agregó- con unidad política y un programa antiinflacionario; entre los elementos a favor de la economía argentina enumeró que la situación fiscal de las provincias que “por primera vez en treinta años esta sólida y consolidada”, y el sistema financiero argentino que “es solvente”, aunque subrayó que “tiene una cuestión que tiene que resolverse: el 65% de los depósitos del sistema están atados a Leliq”.
Sin embargo, sopesó Capitanich, estas variables "positivas" se enfrentan a un ataque especulativo continuo: "Estar todo el tiempo sobre el problema cambiario es un problema. Lo mismo que el enfoque de la economía bimonetaria, hay muchas transacciones en moneda extranjera”.