El presidente Javier Milei le aseguró este martes al sector agropecuario que, en caso de consolidarse la tendencia de solidez fiscal, cumplirá con su promesa de bajar las retenciones. El mandatario le volvió a prometerle al sector una baja de impuestos para incentivarlos con la liquidación de divisas, mientras en silobolsas aún queda el 46 por ciento de la soja sin vender y el 21 por ciento del maíz en la misma situación, según cifras de las cámaras Ciara-CEC. De acuerdo con el informe sectorial, entre soja y maíz sin vender y sin fijar (precio de operación) existen unos 28,6 millones de toneladas acopiadas.
“En la medida que podamos consolidar esta tendencia a lo largo del año que viene y que se pueda verificar que el aumento de ingresos no es de tipo transitorio, sino de tipo permanente, más la reducción del gasto público porque la motosierra continúa, se va a traducir en baja de impuestos", dijo el presidente en un evento en la Rural. Los productores de granos especularon desde el inicio del gobierno libertario a una seguidilla de devaluaciones y/o una baja considerable en las retenciones de los principales cultivos exportables. Por el contrario, la caída en la brecha cambiaria incluso les redujo el tipo de cambio “blend” (especial para la liquidación del sector) hasta empardarlo con el dólar oficial.
“Desde la cosecha, el precio de la soja en el mercado local ha subido un 10 por ciento en pesos, mientras que algunos instrumentos financieros han subido por encima del 70 por ciento en el mismo periodo. En el caso más extremo, para que guardar soja haya sido la mejor decisión, la tonelada debería valer 427 dólares o el tipo de cambio debería ser de 1.734 pesos por dólar, valores muy elevados en comparación a los vigentes en el mercado”, advierte un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba.
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La que le saca a jubilados le promete al campo
En un hecho sin precedentes, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) registró entre enero y octubre un superávit financiero acumulado de 5,2 billones de pesos, que obtuvo a partir de un cruel recorte a los adultos mayores. La ANSES “se ahorró” las transferencias a las cajas previsionales provinciales que no fueron transferidas a la Nación, se vetó la ley de movilidad jubilatoria que proponía mejoras en los haberes de los jubilados y se ajustaron los criterios de acceso a las asignaciones familiares para trabajadores en relación de dependencia y para las pensiones no contributivas por invalidez laboral, según un informe de la Fundación Éforo.
Los ajustes suelen ser justificados en que no existen fuentes de financiamiento para compensarla. Sin embargo, el Gobierno promete eliminar un impuesto clave sin plantear con qué otro instrumento (tributo) compensará la pérdida en la recaudación.
El Presidente se presentó en “Delegados, Directores y Consejo Federal de la Sociedad Rural”, que se realizó este martes en el predio de la institución en Palermo. Tras una breve intervención en el restaurant de predio, Milei cerró su discurso con un mensaje optimista por las expectativas del crecimiento económico, una inflación en descenso y la disminución de los derechos de exportación como objetivo para el próximo año. "No tengan dudas que uno de los impuestos que vamos a atacar son las retenciones", precisó el jefe de Estado, tras recordar que cumplió con la desregulación del mercado, además de quitar una serie de trabas en la comercialización del sector.
Cuánto retiene el campo de soja y maíz
En soja, las ventas a precio más las fijaciones totalizan 27,422 millones toneladas, el 54 por ciento de la producción. Quedan por vender y por fijar precio 23,078 millones de toneladas, el 46 por ciento de la cosecha, según el Monitor Agroindustrial de noviembre que publicó Ciara-CEC este martes. Los exportadores compraron 6,205 millones toneladas (5,540 millones de toneladas a precio y 665 mil toneladas a precio a Fijar - PAF).
Los principales compradores de soja fueron las empresas de la industria aceitera, con 26,849 toneladas, de las cuales 13,448 millones. La mitad fueron compradas a fijar precio (PAF) y el resto a compras a precio, según estimaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Quedan aún en manos del productor por vender o por fijar precio el 46 por ciento de la cosecha (23,078 millones de toneladas). “A pesar de ello, los productores resguardan la soja como reserva de valor porque la demanda de la industria aceitera está activa todos los días del año”, sostiene el informe.
En el caso del maíz sin precio, el porcentaje se reduce al 21 por ciento el volumen que podría ser exportado pero aún no tiene valor fijado. Los exportadores compraron 33,267 millones de toneladas, de las cuales 23,415 (70 por ciento) son compras realizadas a precio y 9,852 millones son a precio a fijar (PAF), equivalentes al 30 por ciento de las compras totales. A diferencia de la soja, cuyas compras con precio equivalen al 54 por ciento de las compras totales de la exportación más la industria, las operaciones de maíz con precio de la exportación representa el 79 por ciento del total.
“El maíz fue considerado por los productores para generar liquidez de corto plazo, por este motivo el mayor porcentaje de las ventas es a precio hecho o disponible, mientras que la soja fue considerada como reserva de valor, y al vender a fijar el productor piensa que habrá una mejora en el precio a futuro y decide fijar el precio cuando considera que el mismo ha mejorado”, detalla el informe de Ciara-CEC.