Atraso del dólar: exportadores piden una mayor liberalización del comercio exterior

El atraso del dólar desde la devaluación de diciembre y la incertidumbre sobre qué hará el gobierno de Javier Milei con el tipo de cambio en los próximos meses generan preocupación entre los exportadores, que ahora comienzan a pedir medidas extra de liberalización del comercio exterior para evitar una pérdida de la competitividad por el encarecimiento del peso.

El Tipo de Cambio Real Multilateral (TCRM) mide el precio relativo del tipo de cambio de los bienes y servicios de la economía argentina respecto a sus principales socios comerciales y es el mejor indicador de cuán competitivo es el país frente al mundo. La medición del TCRM elaborada por el Banco Central tocó un mínimo de 83 puntos en noviembre pasado, para saltar luego a un máximo de 132 puntos en enero a raíz de la devaluación que dispuesta por Javier Milei y Luis Caputo en diciembre, con un aumento del 118% en el tipo de cambio.

Pero, desde entonces, el ministro de Economía dispuso un virtual congelamiento del dólar, al dejar devaluarlo a solo un 2% mensual frente a una inflación que nunca bajó de los dos dígitos con un pico del 25% en diciembre. Así, el TCRM se atrasó fuertemente, cayendo en picada en los últimos cuatro meses para tocar un mínimo de 98 puntos en abril. Si bien no es un valor extremadamente atrasado (está a un nivel similar a marzo de 2022 o marzo de 2018), sí resulta prácticamente inédita la velocidad y magnitud de la caída.

Este escenario, sumado a que continuamente Milei ratifica que no habrá un nuevo salto devaluatorio en el corto plazo, comenzó a generar preocupación en las empresas del sector transable, que ahora empiezan a pedir al Gobierno medidas extra para prevenir lo que, temen, puede ser una acelerada pérdida de competitividad en los próximos meses.

Las medidas que piden las cámaras exportadoras por el atraso del dólar

De este modo, las principales cámaras que nuclean a empresas exportadoras reconocieron el problema del atraso de la moneda norteamericana, por lo que salieron a insistir, bajo una postura liberal, con políticas extra para revertir las consecuencias de la menor competitividad. Se trata de medidas generales, que van más allá de la coyuntura de estos meses. Sin embargo, la reiteración enunciada por las asociaciones empresarias habla de la renovada preocupación del sector en el contexto de las políticas mileístas.

"En un contexto como el actual, en el que el valor del dólar 'se atrasa', es decir que el valor del peso está recuperando valor relativo respecto de las principales divisas en el mundo y siendo esto un elemento central del plan de estabilización macroeconómica instrumentado por el gobierno nacional, consideramos poner en relevancia que el valor de nuestra moneda es un factor clave para la competitividad, pero que no es el único", explicó en ese sentido la Federación de Cámaras de Comercio Exterior de la República Argentina (FECACERA) en un comentario a El Destape.

Por ello, en vez de reclamar principalmente una nueva devaluación, la cámara considera central que el Gobierno tome otra serie de medidas como "brindar mejores condiciones de acceso a insumos productivos" o "bajar las cargas impositivas" para la industria. También reclaman una flexibilización "del marco laboral que hoy es demasiado rígido" y la ampliación del "acceso al financiamiento, que hoy está muy acotado".

A largo plazo, FECACERA considera que deben "actualizarse los marcos normativos y jurídicos" de modo que "inviten a los capitales internacionales", así como reducirse las "barreras arancelarias y paraarancelarias" 

"La agilidad en la implementación de estas medidas resulta vital para atenuar la caída de empresas que ya se está observando", advirtió FECACERA, aunque aclaró que "el Gobierno ha tomado debida nota de estas inquietudes" en las reuniones que mantuvieron con funcionarios nacionales, y destacaron el mejor acceso de las pymes al MULC que determinó el Banco Central la semana pasada.

La Cámara Argentina de Comercio y Servicios expresó una postura similar. "Una mera devaluación no es solución: Argentina y Venezuela son los más devaluadores y los de peor performance exportadora de este siglo en la región", afirmó Marcelo Elizondo, miembro de la mesa directiva de la CAC y experto en comercio internacional. 

Al contrario, afirmó que ganar competitividad requiere de "un mejor régimen impositivo", tanto con menos carga como con la "quita de tributos específicos (derechos de exportación, impuesto PAIS, altas tasas por servicios en frontera)".

También como FECACERA, Elizondo agregó que "deben producirse otras reformas sistémicas, como la laboral y de marco legal de administración de producción y comercio", y pidió, en el plano fronterizo, "menos intervencionismo en frontera; agilidad en aduanas; mejores puertos; mejores prestaciones para certificaciones, aprobaciones y habilitaciones".

"Se requieren tratados de integración comercial internacionales: 70% de todo el comercio internacional planetario se beneficia hoy con arancel 0% en frontera y nosotros no participamos mayormente de ello", agregó el directivo de la CAC. Mientras todo esto no ocurra, "el sector privado deberá lograr una sustancial mejora en la oferta exportadora", cerró Elizondo.