El dólar blue frena la escalada de las últimas jornadas y desciende a $186, mientras el Banco Central volvió a desprenderse el jueves de USD 90 millones ante la sostenida presión de la demanda de divisas en la plaza cambiaria.
El billete en el segmento informal mantiene un retroceso de 50 centavos. Así, puso un freno a la suba de las últimas jornadas, aunque en los primeros días de septiembre ya registró un aumento superior al de todo agosto ante el creciente apetito para dolarizar carteras en los días previos a las PASO.
Por otro lado, el dólar MEP, que se adquiere a través de la bolsa porteña mediante la compra y venta de bonos, operó estable a $170,75. El contado con liquidación, similar al dólar bolsa, pero para sacar divisas del país cotizó en alza y llegó a $172,95.
En tanto, el dólar minorista fue ofrecido a un promedio de $97,47 para la punta compradora y a $103,70 para la vendedora. Sin embargo, si se toman en cuenta los recargos e impuestos correspondientes, se percibe una consolidación por encima de los $170, dado que el dólar solidario llegó a $170,36.
Durante el mes pasado, el blue experimentó un aumento de $1, mientras que en el inicio del nuevo mes ya sumó $5. Por su parte, el dólar mayorista ganó cuatro centavos y terminó a $98,05.
En el sector en el que operan las grandes empresas se ve un crecimiento en la demanda impulsado principalmente por los importadores en un contexto en el que además se da una baja en la liquidación por parte del sector agroexportador. Ante ese escenario, el Banco Central tuvo que vender nuevamente unos USD 90 millones.
A lo largo del mes, la autoridad monetaria ya sacrificó en torno a USD 500 millones de las reservas, que este jueves finalizaron en USD 45.726 millones. Pese a la presión sobre el dólar, el ministro de Economía, Martín Guzmán, insistió en que la situación del país es "robusta" para evitar cimbronazos con el dólar, que en los últimos días escaló con fuerza en la previa a las elecciones.
El funcionario nacional sostuvo que "el tipo de cambio oficial lo hemos planteado con un sendero depreciatorio en el año de alrededor de 24%, que se viene cumpliendo", y aseguró que el objetivo es "llegar a diciembre con esa pauta".
"Hoy la Argentina tiene una brecha cambiaria porque hay controles de capitales que adoptó el gobierno anterior, en el contexto de un descalabro macroeconómico", consideró.
A su vez, remarcó: "Hoy enfrentamos una situación de mayor robustez en el frente externo" y añadió que "el año pasado las brechas llegaron a ser 130 y 150%, y ahora se redujeron entre 60 y 70 puntos porcentuales".