Caducó el lunes la propuesta de la provincia de Buenos Aires a los bonistas para canjear la deuda externa, pero se mantienen las negociaciones con los acreedores hasta el 26 de mayo. Si el gobierno sub-soberano no reestructura su pasivo, este año debería pagar sólo en intereses el equivalente a tres presupuestos de salud. En un contexto normal eso sería difícil de llevar adelante, por lo que en medio de la pandemia se torna injustificable.
El ministro de Hacienda provincial, Pablo López, debe canjear U$S 7.148 millones con legislación neoyorquina en manos de privados. El planteo del funcionario de Axel Kicillof se alineaba al de su par nacional, con tres años de gracia, una quita de capital del 7%, del 55% de los intereses para el próximo lustro y una extensión de la vida promedio de los títulos de los 4,7 años actuales a los 13 años.
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López no llegó al elevado porcentaje de aceptación que precisaba para obligar al resto de los bonistas a entrar al canje, pudo saber El Destape. En caso de que no reestructure la deuda, Kicillof afronta obligaciones por $ 220.000 millones para 2020. De acuerdo a las estimaciones que surgen de mirar las finanzas sub-soberanas, el monto equivale al 20% de la recaudación total. Por lo tanto, si no reestructura, debería contar con sólo el 80% de los ingresos para mantener en pie a la provincia con mayores habitantes del país. Una tarea que, en el contexto del 40% de pobreza y la actual pandemia se torna imposible.
Esos $ 220.000 millones equivalen a 3,1 veces el presupuesto de PBA en salud para todo el año. Ascienden también a cuatro meses de pago de todos los salarios, lo que abarca médicos, policías, docentes, administrativos. Se pueden comparar si no con 2,75 años del gasto destinado a seguridad.
Antes de la emergencia del coronavirus, Buenos Aires venía de una recesión iniciada en 2018. En enero en la producción industrial bonaerense se contrajo 4,9% interanualmente. En el mismo mes se registró una destrucción de 55.700 puestos de trabajo registrados privados contra enero de 2019: una caída del 2,9% interanual, con lo que fue el vigésimo mes de baja consecutiva.