Guiño clave de Estados Unidos a Argentina, en el tramo final de la negociación con el FMI

Juan González, funcionario cercano a Joe Biden, planteó cuáles son los desafíos del país para lograr un acuerdo con el FMI y sugirió que el plan económico debe ser ideado por Argentina y no por el organismo. Estados Unidos es el principal accionista del organismo.

07 de diciembre, 2021 | 19.19

Mientras el Gobierno intensifica las negociaciones con el FMI para cerrar un acuerdo que redefina los pagos de la deuda, un alto funcionario de la administración de Joe Biden realizó un guiño a la gestión de Alberto Fernández. Desde los Estados Unidos, principal accionista del Fondo, señalaron la necesidad de que nuestro país sea quien diagrame el programa económico de cara a los próximos años.  

Juan González, el subsecretario para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, planteó cuáles son los desafíos del país para lograr un acuerdo con el FMI y la necesidad de que Argentina se reinserte en el circuito financiero internacional. En ese sentido, sostuvo: "Hoy, después de 20 años, tenemos la oportunidad de dar vuelta la página y reafirmar el valor de las Instituciones que componen al Banco Mundial y hacer que la Argentina regrese al sistema financiero. Ambas partes deben llegar a un acuerdo con fundamentos sólidos y razonables".

En una conferencia regional organizada por la consultora Eurasia Group, González remarcó una condición necesaria para que el entendimiento llegue a buen puerto: "El FMI ha aprendido que no siempre es posible usar un modelo para prescribir políticas macroeconómicas en un entorno político, se deben tener en consideración el contexto nacional y las dotaciones factoriales". Y sentenció: "A fin de cuentas, los argentinos deben poder idear un plan". Y expresó: "Podría ser algo transformador para la Argentina y nuestras relaciones bilaterales. Biden habla acerca de políticas políticamente sostenibles y necesitamos estabilidad en la región, ya que Brasil y Argentina son muy importantes para nosotros".

Cabe recordar que en el primer trimestre de 2022, Argentina debería enfrentar vencimientos por U$S 7.500 millones entre capital e intereses, cuando las reservas netas del Banco Central se estiman en torno a los U$S 4.000 millones.

Se aceleran las negociaciones

La misión a Washington conformada por funcionarios técnicos del ministerio de Economía y del Banco Central comenzó esta semana a dar los trazos finos del acuerdo con el Fondo. La recta final comenzará horas antes de Navidad, cuando el directorio del FMI dé a conocer su evaluación técnica del programa que acordó e incumplió Mauricio Macri. Para los primeros días de enero podría estar listo un borrador o una carta de intención que dé a conocer los lineamientos generales del entendimiento de cara a las últimas negociaciones. La firma de un nuevo programa podría esperar hasta febrero o incluso a comienzos de marzo.

La propuesta que lleva adelante el ministro de Economía Martín Guzmán es inusual: no existen antecedentes de que el FMI haya aceptado un programa con las características que propone la Argentina. Según fueron conociendo en los últimos días empresarios, sindicalistas y dirigentes políticos y sociales que se interiorizaron en los términos de la negociación, desde Washington existe, en principio, buena predisposición para llegar a un acuerdo que no implique un ajuste del gasto público con consecuencias recesivas para la actividad económica, ni una devaluación abrupta que alimente la inflación, ni reformas regresivas en las leyes laborales y previsionales.

El plan prevé un sendero hacia el equilibrio fiscal de cuatro años en forma gradual, además de un período idéntico de gracia antes de tener que hacer los primeros desembolsos en 2026. El acuerdo contempla los 44 millones de dólares que recibió Macri, lo que significa que el país volverá a disponer de los recursos que haya desembolsado para saldar cuotas que vencieran antes de la firma. También incluye una cláusula de país más favorecido, que implica que cualquier beneficio que en el futuro reciba otro acreedor o grupo de acreedores podrá ser adoptado por sin pagar ninguna penalidad.