La administración de Javier Milei hizo los deberes antes el FMI pero con un bono extra. De acuerdo a la revisión de las metas para el primer de este año, el organismo multilateral de créditos informó que el Gobierno “sobre cumplió las metas”, por lo que quedó liberada la posibilidad de un nuevo envío de fondos por casi 800 millones de dólares. Esos dólares llegarían en junio y forman parte del programa de Facilidades Extendidas firmado por el FdT para cancelar la deuda tomada por Mauricio Macri.
Los técnicos del Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmaron que el país cumplió; luego del análisis de los equipos técnicos, el paso siguiente le corresponde al Staff Level Agreement (SLA). El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, mantuvieron reuniones con los técnicos del FMI para ajustar los detalles de las planillas mostradas durante el viaje.
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“La octava revisión técnica del programa confirmó que el superávit primario fue cuatro veces más alto que lo previsto cuando se acordó el crédito de Facilidades Extendidas”, indicaron fuentes oficiales a la Agencia de Noticias NA. Por otro lado, las reservas del Banco Central acumularon más de US$ 2.000 millones de lo que había sido renegociado por el propio Luis Caputo, ministro de Economía de la administración libertaria.
Los recursos que recibirá el país servirán para cancelar los propios vencimientos con el organismo multilateral. Esta misma semana, el Banco Central pagó 1.900 millones de dólares de los vencimientos pautados.
Caputo busca, además, otro acuerdo con el Fondo para seguir sumando recursos. El objetivo dolarizador requeriría cerca de 15.000 millones de dólares. Pero no la tiene fácil el ministro especialista en deuda externa. Por el momento, los Fondos de Inversión no desembolsaron nada. Todos están a la espera de la aprobación definitiva del DNU 70/2023 y la ley de Bases.
Los empresarios de los Estados Unidos son de los activos lobistas en la sanción de dicha norma. Así lo deja saber el embajador en el país, Marc Stanley cada vez que puede. Según las pretensiones exhibidas por la Embajada, los ojos estarían puestos en el litio, Vaca Muerta y en alguna de las empresas plausibles de ser privatizadas.
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