El FMI pronosticó que este año la economía de Argentina caerá 3,5%, mientras que la inflación llegará al 140% en diciembre. Asimismo, estimó que los "esfuerzos" que realiza el gobierno de Javier Milei en el frente fiscal "deben complementarse con una continua racionalización" de los subsidios a la energía. Tras aprobar el desembolso por U$S 800 millones, difundió su staff report y anticipó que Argentina podría volver al mercado de capitales en 2025.
Según el organismo, tras los aumentos de las tarifas de electricidad y gas de una media de 350% y 200%, respectivamente, en el primer trimestre de 2024, "las autoridades planean alcanzar el costo total recuperación para la mayoría de los usuarios y sustituir el actual esquema de segmentación tarifaria con uno que apoye únicamente la canasta básica de consumo de energía de los hogares vulnerables durante el segundo trimestre de 2024".
En una nueva edición de su staff report, el organismo destacó que, con ese fin, "se han elaborado reformas detalladas para la transición hacia el nuevo esquema. y se ha emitido un nuevo decreto para eliminar límites a los precios que están vinculados a la fórmula de indexación salarial". En consecuencia, puntualizó que se espera que el ajuste de los precios de la electricidad (PEST) y los precios del gas (PIST) se produzcan en los próximos meses tras algunos retrasos, "mientras que se establecerán límites más estrictos al consumo de electricidad subsidiado según sea necesario".
"Se espera que estas acciones aseguren una reducción del 0,7% en el sector energético, un proyecto de ley de subsidios este año y regularizar las finanzas del sector", enfatizó el informe del Fondo Monetario.
Cuándo podría el Gobierno tomar nueva deuda
El Fondo afirmó que el Gobierno debe "continuar preparando el terreno" para que la Argentina vuelva al mercado de capitales internacional y estimó que so podría lograrse a fines del año próximo "o antes".
"En el lado externo, los esfuerzos deben continuar para preparar el terreno para volver a acceder mercados internacionales de capitales. Se prevé que se proporcionen US$1.400 millones de financiación neta en 2024, del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y otros organismos regionales, como el Banco de Desarrollo de América Latina América y el Caribe (CAF) y el Fondo de Desarrollo (FONPLATA) quienes han acordado proporcionar apoyo de liquidez para financiar la expansión de programas de redes de seguridad social", sostuvo el organismo en su reporte difundido desde Washington.
Además, destacó que "compromisos firmes de China están en su lugar", incluso para refinanciar sustancialmente la parte retirada del swap del Banco Popular de China (PBOC) por US$5.000 millones, mientras que puntualizó que la financiación renovada del proyecto de represas hidroeléctricas en la Patagonia "estará en línea con el progreso de su implementación, tal y como las autoridades argentinas trabajen para superar los problemas ambientales y laborales".
En este marco, el Fondo Monetario pronosticó que en los próximos años, las autoridades argentinas "seguirán centradas en reducir aún más los gastos fiscales y externos" para volver a acceder a los mercados internacionales de capital "a finales de 2025 o antes, si es posible, con el objetivo de gestionar mejor las grandes obligaciones cambiarias que vencen, evitando al mismo tiempo un aumento de los endeudamiento".
Caída de la actividad y menos inflación
Por otra parte, el FMI estimó que la economía argentina caerá 3,5% este año y que la inflación llegará al 140% anual en diciembre. Así, el organismo empeoró su proyección de crecimiento económico del país para este año.
"La producción se contraerá alrededor de un 3,5% en 2024 (anteriormente un 2,75%), aunque se espera un cambio de rumbo en la actividad durante la segunda mitad de este año, a medida que se alivien los obstáculos de la consolidación fiscal, los salarios reales comiencen a recuperarse y la inversión se recupere en respuesta a las reformas", según el informe.
Para el FMI, "la actividad y la demanda se han contraído marcadamente, aunque hay señales tempranas de que algunos sectores podrían estar cerca de tocar fondo. Varios indicadores apuntan hacia una posible estabilización de la actividad económica a partir de abril, incluidas mejoras en la confianza del consumidor, un repunte del crédito privado y del consumo de cemento, todo ello en el contexto de un repunte de la producción agrícola tras la sequía del año pasado".
Con relación a la inflación, estimó que siga en baja, para terminar 2024 en el 140% interanual y "disminuyendo aún más en el mediano plazo, a medida que la demanda de pesos se recupere de niveles históricamente bajos".